¿Quién es Nino Baglieri?
Era un joven como muchos otros, decidió no continuar sus estudios y se sumergió en su trabajo. A los 17 años tuvo un accidente: se cayó de un andamio de 17 metros de altura - "Un metro al año", solía decir- y se quedó cuadripléjico: así que durante 10 años, los años de su juventud, tuvo una rebelión contra Dios, el Dios que él creía que lo había castigado.
¿Cómo vivió su vida Nino?
Nino es un claro emblema de que la vida de los santos es una experiencia humana, y un continuo sufrimiento con todas las características de la humanidad. Al principio no estaba contento, sentía el dolor y el peso de su condición de enfermo.
Recuerdo una vez que con los otros CDBs estuvimos en su cuarto para el retiro mensual y su cuñado vino a cambiarlo. Estaba a punto de salir, pero Nino me dijo que me quedara. Y cuando su cuñado levantó ese cuerpo indefenso y lleno de llagas, por un momento tuve la impresión de ver a Cristo preparado para la crucifixión. Tenía una llaga muy profunda en la espalda, dijo que podía entrar el puño de una mano. Pero unos minutos más tarde, después de haber sido atendido, allí en su cama, volvió a sonreír, preparado para consolar a los demás.
Una experiencia que teníamos muchos, cuando lo íbamos a visitar, pensábamos en hacerle compañía, consolarlo y cuidarlo, pero nosotros salimos reconciliados, animados, preparados para disfrutar aún mejor de la vida.
¿Cuál es el mensaje que deja Nino Baglieri?
Hoy vivimos en una época en la que no siempre se respeta la vida. Nino, es un himno al valor de la vida, sin importar el tiempo o la situación. Y otro mensaje es: descubrir a Dios y hacerlo entrar en nuestra vida, tiene un efecto increíble en la vida.