Junto a los equipos organizadores de Don Bosco Mondo y del DBTA, al curso formativo asistieron los superiores de las inspectorías y visitaduría ssalesianas, economos inspectoriales y directores de las Oficinas de Planificación y Desarrollo de diez circunscripciones salesianas: África Nigeria-Níger (ANN), Angola (ANG), África Central (AFC), África Congo Congo (ACC), África Grandes Lagos (AGL), África Tropical Ecuatorial (ATE), África Occidental Norte (AON), Mozambique (MOZ), Madagascar (MDG) y África Este (AFE), así como la Delegación de Sudán dentro de la Ispettoria AFE.
El laboratorio comenzó con reflexiones sobre los procesos, los éxitos y los desafíos de la Fase 1 del Programa Global (GP1). Esta sesión introspectiva destacó resultados significativos, identificando también áreas a mejorar y proporcionando valiosos enfoques para el GP2. El programa está estructurado en tres módulos: Capacidades Institucionales; Modernización y Defensa; Trabajo en Red y Aprendizaje Conjunto. Cada módulo se centra en los niveles micro, medio y macro, con el objetivo de elevar los Centros de Formación Profesional a nuevos niveles de calidad y relevancia, mientras se refuerza su impacto y eficacia.
El padre Maximus Okoro, director del DBTA, destacó el compromiso compartido para la emancipación de los jóvenes, reflexionando sobre el camino recorrido desde 2017. Reiteró el objetivo de proporcionar oportunidades de trabajo y crecimiento dignos para los jóvenes y pidió a los participantes asegurar que el programa logre sus objetivos en los once países participantes.
El hermano Steffen Möhlendick, responsable de Proyectos de Cooperación Pública de Don Bosco Mondo, destacó el compromiso de alcanzar los objetivos del proyecto que transformen vidas y comunidades, estableciendo un nuevo estándar para la Formación Profesional en todo el continente, y recomendó la creación de un sistema de Formación Profesional resiliente, inclusivo y adecuado para el futuro.
Por su parte, el padre George TJ, superior de AFE y presidente del Consejo de Administración del DBTA, subrayó la importancia del compromiso tanto de las inspectoríascomo como de los Centros de Formación Profesional para el éxito del GP2. Señaló la necesidad de calidad de vida y de empleo digno para los jóvenes, manteniendo la calidad de la marca DBTA y promoviendo una mejora continua.
Los participantes del laboratorio participaron en sesiones completas que trataron sobre la evaluación del GP1, la matriz de comunicación, los roles y responsabilidades de los stakeholders, el marco lógico de las actividades, las directrices financieras del proyecto, la matriz de implementación, el monitoreo y la evaluación, y la rendición de cuentas de los proyectos. Estas sesiones garantizaron una comprensión profunda de los temas y una preparación completa para el GP2.
Los participantes expresaron su aprecio por el programa bien estructurado, las discusiones constructivas y las sesiones profundas, comprometiéndose al éxito del GP2. Durante el laboratorio, se firmaron contratos para la ejecución de los programas por parte de los ecónomos, comprometiéndose oficialmente con la iniciativa y sus objetivos.
El laboratorio de lanzamiento del DBTA – GP2 marcó un paso importante en el fortalecimiento de la formación profesional en África subsahariana. Con una visión compartida y un esfuerzo colectivo, el programa tiene como objetivo crear impactos positivos y duraderos en la vida de los jóvenes, proporcionándoles las habilidades y oportunidades para un futuro más brillante.