Nalgonda es una localidad de aproximadamente ciento diez mil habitantes, situada en el corazón de un distrito agrícola marcado por una larga historia de pobreza. Hoy, la situación se ha vuelto aún más crítica por los cambios climáticos: largos períodos de sequía se alternan con inundaciones destructivas, que ponen en riesgo las cosechas y hacen cada vez más precario el sustento de las comunidades locales.

Las familias, constituidas en gran parte por agricultores pobres y a menudo sin educación, luchan diariamente para satisfacer necesidades fundamentales como el alimento, el acceso a la educación y a la atención médica. En este escenario, Don Bosco Academy representa un faro de esperanza, ofreciendo a los jóvenes de las zonas rurales una educación de calidad que les abre nuevas oportunidades de crecimiento y desarrollo.

La institución salesiana se encuentra en un área donde casi la mitad de la población vive en condiciones de pobreza y la agricultura representa la principal fuente de ingresos. Una de las mayores dificultades que ha enfrentado la escuela ha sido la ausencia de un sistema de transporte público eficiente, lo que ha complicado tanto el acceso de los estudiantes a la escuela como el reclutamiento de docentes cualificados.

Gracias al apoyo salesiano internacional, y en particular al trabajo realizado por la Procura Misionera salesiana de Turín, Missioni Don Bosco, la misión salesiana ha podido adquirir recientemente un autobús escolar, que ha tenido un impacto significativo en la vida de muchos niños y de sus familias, ofreciéndoles la posibilidad de acceder a una educación de calidad e integral, y a través de ella, a la oportunidad de construir un futuro mejor.

Este medio de transporte seguro y eficiente ha permitido aumentar las inscripciones, mejorar la asistencia escolar y garantizar una mayor puntualidad tanto de los estudiantes como del personal docente. El impacto de este proyecto ha sido extraordinario: las inscripciones han aumentado de trescientos quince a cuatrocientos cincuenta estudiantes. Al mismo tiempo, se ha reducido el porcentaje de abandono escolar, permitiendo a más jóvenes completar su trayectoria educativa. La seguridad en los desplazamientos ha mejorado notablemente, garantizando a los niños un viaje más tranquilo y protegido; y también el personal escolar ha podido llegar a la institución de manera más ágil y confiable, contribuyendo a una mejora general de la calidad de la enseñanza.

Los beneficios de este proyecto se extienden también a las familias y a toda la comunidad. Las familias han visto reducirse el peso económico y logístico relacionado con el transporte escolar, mientras que la comunidad ha podido apreciar los avances educativos y el desarrollo de un ambiente más favorable para el crecimiento y la formación de los jóvenes.

En este sentido, el compromiso benéfico ofrecido por los muchos sostenedores de Missioni Don Bosco no se ha limitado a proporcionar un medio de transporte a una comunidad necesitada ubicada a miles de kilómetros, sino que ha regalado oportunidades, esperanza y la posibilidad de un futuro mejor a muchos jóvenes.

“La educación es la clave para romper el ciclo de la pobreza, y gracias a ustedes, muchos niños de Nalgonda podrán recibir una formación que los acompañará durante toda la vida. ¡Gracias nuevamente de corazón!”, expresan con gratitud los salesianos de Don Bosco Academy de Nalgonda.

Para más información, visitar el sitio: www.missionidonbosco.org

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