Las instituciones de la UE estuvieron representados al más alto nivel, con la presencia del Sr. Antonio Tajani, Presidente del Parlamento Europeo, la Sra. Mairead McGuinness, Vicepresidenta del Parlamento Europeo, y del Sr. Franz Timmermans, Vicepresidente primero de la Comisión Europea.
El primer día del Congreso, se abordaron tres aspectos importantes del proyecto de la UE: inclusión social, ciudadanía y economía. El Cardenal Juan José Omella, Arzobispo de Barcelona y Mons. Charles Scicluna, Arzobispo de Malta, presentaron la visión de la Iglesia. Por la tarde, las actividades concluyeron con una oración y una cena organizada por la Comunidad “San Egidio” en la iglesia de Santa María de Trastevere.
El sábado 28 de octubre, los 350 participantes se dividieron en 18 talleres y reflexionaron sobre cinco preguntas: el estado actual de la UE, las expectativas, los sueños, los miedos y las posibles contribuciones de la Iglesia católica al proyecto europeo. Los moderadores de los talleres fueron los embajadores de los países de la UE de la Santa Sede. Entre los participantes estuvo el Ecónomo General de los Salesianos el Coadjutor Jean Paul Müller. La tarde estuvo dedicada a un debate moderado por Mons. Paul Gallagher, Secretario del Vaticano para las Relaciones con los Estados.
El momento muy especial tuvo lugar con la audiencia privada que el Papa Francisco dio a los participantes. Después de escuchar las intervenciones del cardenal Reinhard Marx, Presidente de la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE), y del Presidente Tajani; el Papa ofreció un discurso donde presentó las contribuciones ofrecidas constantemente por el pensamiento cristiano a Europa desde diversas perspectivas: la persona, la comunidad, Europa como un lugar de diálogo y un espacio para la inclusión, la solidaridad, la fuente de desarrollo, la promesa de paz y, finalmente, como el alma del continente.