Llegaron allí un domingo de julio de 1845, pero permanecieron poco tiempo, solo dos meses. El ruido de los chicos provocó las quejas de los vecinos y el Consejo municipal los obligó a trasladarse a otro lugar.
Con el apoyo del Arzobispo, Don Bosco pudo trasladar su Oratorio al patio de la iglesia del Santísimo Crucifijo, llamada San Pietro in Vincoli, cerca de la Obra del Cottolengo. Pero también esta vez fue por poco tiempo.
Después de algunos otros traslados, fue en 1846 cuando finalmente Don Bosco llegó a Valdocco. Era el Domingo de Pascua, cuando se inauguró el Cobertizo Pinardi, que se convertiría en la pequeña capilla donde se concentraría la actividad de Don Bosco en los primeros años y donde muchos chicos encontrarían ayuda y hospitalidad.