El “Dicasterio para la Formación” ha concentrado las fases de formación a partir del noviciado. Al crear casas de formación “interinspectoriales” se logra una mayor riqueza y un mayor número de jóvenes en formación, se unen fuerzas con la presencia de salesianos formadores de diversos países y se crea un ambiente de interculturalidad y globalización de la Congregación. Como lo ha revelado en muchas oportunidades el P. Ángel Fernández Artime, Rector Mayor, las casas de formación son “de” y “para” la Congregación. “Nuestra vida salesiana, por opción personal, ya no nos pertenece, no la quiero para mí, la quiero para donarla donde me necesiten, hoy aquí, mañana como misionero. Nos distingue la pasión educativa y evangelizadora por los jóvenes”, enfatizó el Rector Mayor.
Desde el año 2012 la Inspectoría de Centroamérica vivió la experiencia formativa en el Noviciado de La Ceja, Medellín, Colombia. Actualmente, el último grupo que son 8, terminarán el año de Noviciado en enero de 2020.
En la reunión de Inspectores del año 2018 quedaron definidos los lugares para las etapas de formación de los noviciados, posnoviciados y estudiantados de teología de la Región Interamérica. En este contexto se decidió que el noviciado de Coacalco, México, fuera la sede de los novicios de México, Centro América, Antillas y Haití.
Esta es la razón por la que, desde el cuatro de agosto de este año, 6 novicios iniciarán una nueva experiencia en México. Una experiencia que obliga a un cambio de mentalidad.
Este año la comunidad del Noviciado está formada por 5 formadores (2 de MEM, 1 de MEG, 1 de CAM y 1 de HAI) y por 17 novicios (7 de HAI, 6 de CAM, 2 de MEG y 2 de ANT)
Los novicios de CAM son: Axel Rodas (Guatemala), Marco Antonio Aquino (Guatemala), Emmanuel Guantá (Guatemala), Edwin Baños (El Salvador), Fernando Pacas (El Salvador) y Rodrigo Zamora (El Salvador).
Hoy como ayer Dios sigue llamando jóvenes generosos, toca acompañarlos para que puedan hacer la voluntad de Dios.