Las donaciones de arroz se distribuyen en 5 instalaciones del proyecto Lakay en Puerto Príncipe y en la de Cap-Haïtien, que a su vez se divide en dos sectores. Cada una de estas instalaciones fue creada para satisfacer las necesidades de los niños y jóvenes de las dos ciudades, que viven en situaciones de riesgo, en total, gracias a 57 miembros del personal, se benefician de este servicio alrededor de 5700 niños.
René Wantoosly, de 17 años, es uno de los beneficiarios de las donaciones, quien declaró que estaba muy contento. René vive con su madre que tiene problemas de movilidad después de un derrame cerebral, y con sus dos hermanas, una de las cuales es madre soltera y la otra se encuentra a la espera de un hijo, el papá murió.
“Cuando mi padre murió – refiere René - la vida parecía imposible. Terminé en la calle y tuve que encontrar una manera de cuidar de mi madre y mis hermanas. Todo lo que podía hacer era mendigar, limpiar los coches, cargar las cosas para los camiones... Todo esto solo para sobrevivir. Ahora puedo estar en el programa 'Lakay Don Bosco'. Aquí puedo aprender un oficio y recibir tres comidas al día. Las comidas no solo me sacian el hambre que tengo, sino que me dan energía y fuerza para estudiar y jugar con mis amigos”.
La historia de René es especial y conmovedora. Quiere ser carpintero y hacer muebles. “Seguramente, al final de mi formación en Lakay – añadió –tendré la oportunidad de trabajar y mantener a mi familia”.
“A pesar de la situación crítica en la que viven muchos niños y jóvenes antes de llegar a nosotros y de los desafíos sociales y económicos que Haití tiene que afrontar en general, sabemos que un plato de comida llena el estómago, estimula el cuerpo y abre el corazón”, explica el P. Joseph Roliné, Director de “Lakay Don Bosco”.
“René es un estudiante modelo y ahora, gracias a las donaciones de 'Levántate contra el hambre', su salud ha mejorado y puede estar más concentrado en sus clases”, añadió el P. Roliné.
Haití es uno de los países más pobres de América y tiene el mayor nivel de inseguridad alimentaria del mundo, según datos del “Programa Mundial de Alimentos”. La economía haitiana ha decaído enormemente en las últimas dos décadas debido a las crisis política y a los desastres naturales.