“Nací en Fukuoka, Japón, en 1994. Realicé mi primera Profesión Religiosa el 19 de marzo de 2016. En el mes marzo fui enviado a la Visitaduría Papúa Nueva Guinea (PGS) para discernir mi vocación misionera. Fui recibido en Papúa el 5 de abril de 2018.
A mi llegada, tuve 2 semanas de conocimiento cultural en la Casa Inspectorial de Port Moresby. El P. Alfred Maravilla, Superior de PGS, me ayudó a entender no solo la historia y el funcionamiento de la Visitaduría, sino también la cultura y los valores melanesios que son tan diferentes de mi cultura y de mis valores japoneses.
Posteriormente fui asignado a la obra “Don Bosco” de Araimiri, a unas 7 horas de viaje accidentado desde Port Moresby. Me gustaría quedarme en este lugar. Porque después de 3 meses estoy muy contento con mi experiencia. Antes de venir a este lugar. Yo había “idealizado” la vida misionera. Ahora que estoy totalmente involucrado, con mis otros cinco hermanos, me doy cuenta de que la vida misionera es difícil. Muchas veces tenemos lidiar con gente muy difícil, en ambientes difíciles que yo los daba por sentado en Japón. No tenemos electricidad, no hay internet, no se tiene señal de teléfono… Perdí un poco de peso, pero estoy bien de salud. He comprendido lo hermoso de sentirse apoyado y estimado por toda la comunidad que me ayuda a crecer en mi vocación salesiana y misionera. En la misma comunidad se encuentra otro clérigo Sylvester Kuli, con quien me siento apoyado”
Hace un mes tuvimos un encuentro de tirocinantes, donde pude aprender mucho del trabajo del grupo junto con los jóvenes Salesianos de Papúa y de la India, El Salvador y Japón. También disfruté mucho del espíritu de familia entre nosotros.
El pasado 9 de junio celebré mis 24 cumpleaños y será una fecha memorable para mí. ¡Agradezco a todos los hermanos de la Visitaduría por esta experiencia misionera!”.