Una acogida cálida y en el espíritu salesiano

El encuentro tuvo lugar en la casa de los salesianos de Essen, un espacio que ha acogido en diversas ocasiones este tipo de iniciativas. Con la presencia del padre Hatto Hatzfeld, director de la casa, y de otros hermanos de la comunidad salesiana, la atmósfera que recibió a los participantes fue la de una gran familia dispuesta a brindar apoyo y amor.

La participación del padre Simon Zakerian y el padre Pier Jabloyan

El evento contó también con la participación del padre Simon Zakerian, superior de los salesianos del Medio Oriente (MOR), y del padre Pier Jabloyan, director de la comunidad de Alepo. Su presencia tuvo un gran valor simbólico, ya que testificó el profundo vínculo que une a las diversas comunidades salesianas, especialmente aquellas que operan en contextos más difíciles. Con su testimonio y cercanía, brindaron un importante apoyo espiritual a los participantes, demostrando cómo el amor de Dios y la esperanza pueden superar cualquier barrera.

“La esperanza que reconforta el corazón”: un tema de vida

El tema central del encuentro, “La esperanza que reconforta el corazón”, se inspiró en el pasaje bíblico del encuentro de Jesús con los discípulos de Emaús. Un tema que resonó profundamente entre las familias sirias e iraquíes, que desde hace años viven situaciones de dificultad, pero que siempre han encontrado en la fe y en la esperanza la fuerza para seguir adelante. El encuentro permitió reflexionar sobre cómo la esperanza no solo puede ser una luz en los momentos oscuros, sino también una fuerza capaz de transformar la vida cotidiana.

Un programa rico en encuentros y espiritualidad salesiana

El encuentro fue diseñado para ofrecer una combinación de momentos de espiritualidad, juego y reflexión. La jornada comenzó con una cálida bienvenida y el momento de las inscripciones, seguido de un juego de conocimiento que permitió a los participantes romper el hielo e iniciar la socialización. Posteriormente, la animación y la música crearon un ambiente alegre y participativo. La celebración de la eucaristía dominical, en el primer domingo de Cuaresma, tuvo un gran significado espiritual, ayudando a los participantes a vivir este tiempo con una renovada conciencia del camino cuaresmal. La oración por la paz en Medio Oriente fue la primera de las oraciones de los fieles.

La jornada concluyó con un almuerzo compartido, que ofreció la oportunidad de crear lazos más profundos entre los participantes. Finalmente, una foto grupal cerró simbólicamente el encuentro, fijando en la memoria colectiva un momento que quedará en el corazón de todos.

Una experiencia de esperanza y fraternidad

El encuentro juvenil y de familias de la diáspora siria e iraquí de los salesianos del Medio Oriente en Essen fue mucho más que un simple evento. Fue una experiencia de esperanza, fraternidad y solidaridad, que permitió a jóvenes y familias compartir momentos de espiritualidad y crecimiento, en un contexto en el que Medio Oriente sigue enfrentando muchas dificultades e inestabilidad. El encuentro demostró que, incluso en tiempos difíciles, la esperanza es una fuerza capaz de reconfortar los corazones, ofreciendo a todos los participantes luz para seguir el camino de la vida, sostenidos por la fe y el amor de Dios.

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