En la jornada introductoria, destacando el cuarto centenario de la muerte de San Francisco de Sales, el padre Morand Wirth SDB, gran conocedor del Doctor del Amor de Dios, presentó el tema "San Francisco de Sales y la espiritualidad de los 'Tabernáculos Vivientes' en Vera de Jesús".

En la comparación entre la espiritualidad de San Francisco y la de los Tabernáculos Vivientes, la intuición básica en ambos casos está en el amor de Jesús, absolutamente central en ambas experiencias místicas. “No hay otro camino sino el Amor –dice Jesús en uno de sus mensajes dictados a Vera Grita–. Desaparezcan en el abismo de mi inmenso Amor". Y entre los muchos puntos de posible comparación, el padre Wirth ha escogido los más significativos: la llamada del amor, la unión con Jesús en la Eucaristía, la necesidad de purificación, el ejercicio de la caridad, el combate espiritual y la misión apostólica.

El padre Silvio Roggia, del Dicasterio de Formación, dirigió la jornada del viernes 29 partiendode algunos textos bíblicos y de los Padres de la Iglesia, y de algunos mensajes de Jesús a la Vera Grita. Así, guió un taller de profundización e interiorización sobre la Eucaristía, de la espiritualidad eucarística en la propia vida, en la vida de las comunidades, en el deseo de alimentar el crecimiento de la conciencia de la Presencia Eucarística en la obra de educación y evangelización.

Esta metodología fue muy apreciada, como demostró la reflexión, la contemplación personal y del debate fraterno, del que surgieron diversas ideas de inspiración y sugerencias prácticas para dar consistencia al “Llévame contigo”, propio de la experiencia mística de la Vera Grita.

La peregrinación a la Basílica de San Pedro en el Vaticano, con la Eucaristía celebrada en las grutas vaticanas ante la tumba de San Pedro y la oración ante la tumba de san Pablo VI embellecieron el encuentro. Pablo VI, como recuerda Mariarita Scrimieri, Coordinadora del Centro de Estudios Opera dei Tabernacoli Viventi, ocupa un lugar central en esta obra no sólo porque su bendición como Sumo Pontífice fue indispensable para su realización, sino también porque fue llamado a ser el primer Sagrario Viviente, la primera "piedra" de la Obra.

• Title Title
• Title Title
• Title Title
• Title Title
•  

Tweet