"Esta es la primera vez que nuestros alumnos han podido conocer y aprender informática utilizando una computadora", explicó el padre José Maria Sabé, misionero salesiano español que se desempeñó como Ecónomo del instituto hasta hace poco. "Nuestros estudiantes durante el último año han cursado ciencias de la computación sin usar una PC o dispositivos similares. Ahora, estamos felices de que puedan usarlos, comenzando por los estudiantes. Estamos realmente agradecidos con nuestros benefactores”, agregó.
El salesiano español prosigue: “En Yaundé hay muy pocas escuelas que dispongan de recursos informáticos. Soñamos con proporcionar dos salas de computación con 55 computadoras en cada aula. Esto le daría a nuestra escuela una oportunidad de oro para ofrecer educación informática de calidad, para que nuestros estudiantes estén debidamente capacitados, como se merecen”.
La escuela secundaria salesiana brinda educación integral a jóvenes vulnerables en el distrito Mimboman de Yaoundé, en un edificio de tres pisos que incluye 12 aulas, laboratorios y oficinas, y le permite a muchos otros jóvenes de la zona asistir a la estructura. El nuevo edificio también ofrece espacio para otros programas educativos, incluido un curso universitario.
Según el Programa Mundial de Alimentos de Camerún, más del 30% de la población vive por debajo del umbral de pobreza y los indicadores de desarrollo humano son bajos. La pobreza es mayor en las regiones del norte y el este, donde las personas a menudo se ven afectadas por desastres naturales y cosechas por debajo del promedio, lo que contribuye a un ciclo continuo de pobreza y hambre.
Junto con el testimonio religioso y el apoyo espiritual, los salesianos en Camerún proporcionan educación y desarrollo social a los jóvenes pobres, para que puedan obtener la formación necesaria que les permita encontrar y mantener un trabajo a largo plazo.