Comunicar: Todos comunicamos, todos tenemos necesidad de comunicar. Según vuestra experiencia, ¿qué cuestión es la más olvidada en nuestra comunicación – educadores, animadores, salesianos– con los jóvenes?
P. Gildasio Mendes - Los jóvenes tienen un código lingüístico para interpretar su vida y la realidad. Uno de nuestros grandes retos es entrar en este código de forma amistosa e interactiva. El código del lenguaje juvenil hace pasar por sus corazones, sentimientos, afectos, deseos de relación y de confianza. Amar a los jóvenes en nombre de Dios es entrar en su vida para realizar un recorrido de fe y de vida cristiana.
P. Miguel Ángel García Morcuende - El tema de la comunicación es muy delicado porque a menudo se corre el riesgo de hablar de “retos”, que aunque estén presentes, en lugar de entrar en el tema de posibilidades operativas concretas. Esto es porque nuestros jóvenes ya están “allí”, invierten su tiempo, viven conectados a través de la tecnología que llevan consigo. Todo esto genera cuestiones primordiales para la pastoral juvenil, que nos llevan a replantear ciertos pensamientos.
P. Alfred Maravilla - La comunicación implica directamente a diversos componentes que es necesario considerar seriamente: antes que nada el emisor que codifica el mensaje escogiendo el mejor canal a través del cual el mensaje se transmite –como las redes sociales, el periódico, etc– del emisor al destinatario. El destinatario, a su vez, analiza el mensaje en su contexto y lo interpreta, tanto de maneras deseadas como no deseadas por el emisor. En conclusión, el feedback indica cómo ha sido recibido el mensaje.
Cristo: Muchos jóvenes buscan acercarse a Cristo o profundizar su relación personal con Él, pero dicen que la Iglesia no les ayuda mucho en esto, más bien lo contrario. ¿Qué les aconsejarías?
P. Gildasio Mendes - Jesucristo nos enseña que proclamar la Buena Noticia es caminar juntos, hacer un proceso de cambio de mentalidad, estar abiertos a lo nuevo, aprender, profundizar y compartir. La Iglesia nos enseña a través de la historia que evangelizar requiere cercanía, caminar juntos. Cuánto más cercanos estemos a los jóvenes, más caminaremos con ellos en el camino de Emaús hoy, junto a ellos podremos descubrir más, cómo vivir su fe en la Iglesia con compromiso y alegría.
P. Miguel Angel García Morcuende - Si desde la pastoral juvenil, por una parte tenemos en mente pasar de los “contenidos” a las “personas”, por otra parte nos damos cuenta que en la praxis, muchas veces no sabemos qué es lo esencial para la fe. Recuperar el contenido del Evangelio, en Jesucristo, es lo que tenemos que hacer con los jóvenes. Como educadores–pastores es necesario preguntarse, si cada uno de nosotros tiene algo que ofrecer y si el propio testimonio de fe puede provocar atracción y servir de llamado. Lo que buscan los jóvenes son relaciones, amistad, complicidad, protagonismo, libertad, intimidad, preocupación, información, alivio, pertenencia, apoyo, sentimientos, cercanía. La propuesta educativo-pastoral salesiana, ¿tiene algo que se conecta a todo esto?
P. Alfred Maravilla - Jesucristo no es una doctrina en la que hay creer sino una persona a quien encontrar. Por ello anunciarlo significa asegurar que cada una de nuestras actividades favorezca una experiencia abrumadora y estimulante de Jesús, capaz de suscitar un interés en su persona que conduce a una adhesión inicial a Él, o a la revitalización de la fe en Él. Sin la preocupación de favorecer este primer anuncio, cualquier iniciativa de evangelizar resultara estéril porque el primer anuncio es esa chispa que nos lleva a la conversión e inicia el proceso de evangelización.
Hoy: ¿Qué nos puede ayudar a seguir y utilizar bien las tendencias actuales y, por otra parte, a no poner límites al buscar formas mejores?
P. Gildasio Mendes - Don Bosco ha vivido el modo de educar y evangelizar partiendo de la pedagogía del corazón del buen pastor que recibe y ama en nombre de Dios. Me gusta la expresión de Don Bosco: profundamente humano, profundamente santo. Cada metodología pastoral tiene como centro el ejemplo del Buen Samaritano. El amor testimoniado en el servicio a los demás, especialmente hacia los más pobres y a los que sufren, genera siempre mensajes nuevos y actuales. El contenido de cualquier mensaje pasa por este modo de amar y servir.
P. Miguel Angel García Morcuende - Con las redes sociales se ha creado un verdadero continente habitado, con vocación de ser un lugar común y público. Si la pastoral juvenil no interviene en este espacio, entonces será responsable de su ausencia. Tenemos la obligación de posicionarnos nuevamente y por tanto escoger cómo actuar. Nadie viviría el digital si no toma de él algunos puntos de crecimiento, ya sea para sí mismo, que para las relaciones significativas que vive. Y es por esto que los jóvenes están siempre buscando un espacio virtual, a menudo en forma de imágenes y frases breves para tal fin. De cualquier forma, la necesidad sigue siendo la de sentirse parte de algo, una parte importante.
P. Alfred Maravilla – Hoy las redes sociales forman parte de nuestra vida. Nos permiten comunicarnos con miles de personas con un clic. Por esto, el reto de todo creyente, de todo educador salesiano, es el de utilizar las redes sociales ofreciendo a los jóvenes contenidos que le ayuden de alguna forma a encontrar personalmente a Jesús. Nuestra cultura actual fluida busca algún punto de estabilidad que ayude a dar sentido allá donde nada se considera permanente. Hoy las redes sociales nos ofrecen una oportunidad única para afrontar cuestiones vinculadas con la virtud, las relaciones y la fe en Jesucristo. ¡Aprovechemos esta oportunidad!
