¿Cómo participas en la pastoral juvenil de la parroquia de Jakobsberg, encomendada a los salesianos de Estocolmo?
Cuando era niña, dejé de ir a Misa con regularidad después de la Confirmación. Solo me acerqué en 2013, cuando tenía 21 años y encontré a mi comunidad en un grupo carismático. El párroco en ese momento me pidió primero que leyera las lecturas de la misa y unos meses después inicié a preparar el grupo para la Primera Comunión, junto con una monja. Entonces desde 2014 soy catequista y gracias a esa experiencia, también sentí que quería hacer más por los niños y desde entonces comenzamos a organizar otras actividades para ellos.
¿Qué te hace sentir feliz como catequista de los niños?
Me encanta verlos crecer en su fe, cuando hacer preguntas, verlos felices en la iglesia y sentir que sienten que la iglesia es también su hogar.
¿Hay algún acontecimiento que llevas en el corazón en tus dos años como presidente de la Asociación de Jóvenes Católicos Suecos (Sveriges Unga Katoliker – SUK)?
Tuve la oportunidad de encontrarme con el Papa Francisco dos veces, como representante de la juventud católica sueca, durante su visita de 2016.
Además, en ese momento, uno de mis objetivos era difundir la Adoración Eucarística y la oración entre los jóvenes. Invité a muchos sacerdotes diferentes durante nuestros campamentos para que pudieran construir una buena relación con los jóvenes y para que se sintieran cómodos al confesarse.
Uno de mis mejores recuerdos sigue siendo sin duda el "Nordiska Ungdomsdagarna", el Encuentro de Jóvenes Católicos de Suecia, Noruega y Dinamarca. ¡Éramos unos 500 y el Espíritu Santo tocó a tantos jóvenes! En esa ocasión también invité al padre Damir, SDB y al grupo musical croata "Božja pobjeda".
Después de este campamento pude iniciar el proyecto de Adoración Eucarística "Kom till mig" (Ven a mí) que organiza la Adoración una vez al mes llevándola a varias parroquias de Estocolmo y le pedí al grupo de jóvenes de mi parroquia que me ayudaran con las actividades, como juegos y refrigerios.
¿Cuáles son los principales desafíos de la juventud católica en Suecia?
- Mmm…. En primer lugar, diría que los padres no rezan con los niños en casa y creen que es suficiente con llevarlos al catecismo.
- Después, somos pocos los católicos en este país, alrededor del 1% y a veces los jóvenes, sobre todo si son los únicos en su clase, no tienen el valor de mostrar su fe a sus amigos.
- Finalmente, en la escuela aprenden lo contrario de lo que enseñamos en la iglesia, en tema de moral.
¿Qué sueña para los Salesianos en Suecia?
Mi mayor sueño es tener un oratorio, tener un grupo de adoración con las y los jóvenes. Que todos los chicos y muchachos se sientan como en su casa en la Iglesia, que los confirmados permanezcan en la Iglesia encontrando su lugar, por ejemplo, como lectores, animadores o miembros del coro...