Ud. llega aquí después de visitar Uganda. ¿Qué iniciativas está siguiendo este país?
Vine a Ruanda para ver personalmente cómo procede la parte económica de algunos proyectos. En esta Inspectoría hay tantos y todos enfocados al desarrollo y crecimiento de los jóvenes. Es importante entender cómo se llevan a cabo, quién los cuida y entender si los recursos económicos se invierten correctamente.
¿Cuál fue su impresión, al conocer a los jóvenes de este país?
Puedo decir que estoy muy contento. Conocí primero a los jóvenes de Uganda y ahora a los de Ruanda, con quienes hablamos abiertamente. Fueron extremadamente honestos al decirme lo que piensan, sin quejarse, de lo qué es bueno y qué se podría mejorar. Además, dijeron que están felices porque tienen la oportunidad de continuar los estudios en escuelas salesianas y centros de formación profesional. El número de alumnos en nuestros centros crece cada vez más y es una señal de que se sienten bien aquí y valoran nuestros proyectos.
¿Tuvo la oportunidad de visitar los proyectos en Gatenga? ¿Qué le pareció?
Reconozco que no conocía este proyecto, tuve que hacer algunos estudios sobre estos y me quedé impresionado, especialmente en lo que respecta al sector agrícola. Se cultivan verduras y hortalizas, los jóvenes aprenden a hacerlo sin tener que importarlas. De esta forma, también aprenden un trabajo, pero eso no es todo. También conocen valores como la paz y el respeto, comprenden la importancia del trabajo duro y son animados a realizar algo positivo por el medio ambiente.
¿La pandemia ha afectado a las misiones salesianas desde el punto de vista económico?
Desafortunadamente sí, debido al Covid-19 muchas personas están perdiendo sus trabajos y cada vez hay más pobres. Esto claramente puede tener un impacto económico en las misiones salesianas en los próximos dos o tres años: aquellos que regularmente donaban sumas de dinero podrían dejar de hacerlo, porque necesitados de esos medios en favor de ellos y sus familias. A la luz de esto, nos centraremos más en consolidar los proyectos existentes.
¿Cuál es su mensaje para los jóvenes de la Viceprovincia AGL?
Tienen que creer en sus habilidades e inteligencia. Incluso quiero añadir algo: usen su tiempo en los centros y escuelas salesianas no solo para aprender, sino también para construir amistades y pensar, juntos, por un futuro mejor.