¿Cómo ha sido tu breve experiencia de voluntariado en Camboya?
La experiencia como voluntaria fue para mi un sueño que se volvió realidad. Siempre soñé con la idea de ser voluntaria en el exterior, para poder de alguna manera restituir y compartir los favores que he recibido de los salesianos y que me ayudaron en el pasado y en el presente. Fue muy confortante para mi, como ex-alumna y como docente.
¿Cuál fue una de las alegrías más grandes de esta experiencia?
Mi alegría venía de la sonrisa de los jóvenes que me fueron confiados, de mis amigos y de las personas que he encontrado durante mi estadía. Me sentí verdaderamente feliz al ver que mis alumnos aprendían algo nuevo durante el tiempo de estudio juntos. Y sobre todo cuando veía que hacía nuevas amistades a pesar de la barrera idiomática.
¿Cuál fue en cambio uno de tus mayores desafíos?
El idioma de alguna manera obstaculizó mi experiencia de voluntariado. ¡Aunque me gustan los desafíos!
¿Qué has aprendido de esta experiencia?
Quizás la mayor enseñanza fue la de ser flexible en cada oportunidad. Hay momentos en los que es necesario adaptarse para pasar de una cosa a la otra. Esta experiencia me ha enseñado realmente a adaptarme a todas las circunstancias.
¿De qué manera esta experiencia influenció el camino de tu vida?
Es una experiencia que ha dejado huella en mi corazón. Como docente aprendí a apreciar a mis estudiantes y lo que ellos han vivido. Entendí que los estudiantes tienen diverso origen, lo que pueden haber influenciado su comportamiento en el colegio. Como hija aprecié aún más a mí familia, sabiendo que algunos estudiantes pueden encontrar a su familia solamente pocas veces al año. Como persona me he sentido muy afortunada de haber hecho este viaje.
¿Qué representa para ti Don Bosco después de esta experiencia?
Don Bosco significa darse a los otros. Es como ofrecer el oído para escuchar, la mano para ayudar a los otros. Como ex-alumna desde más de una década, creo que todos podamos volvernos el Don Bosco de hoy. Todo lo que se necesita es un corazón que palpite por los demás. Seguramente hacer el bien puede llevar muy lejos.
¿Qué puede ofrecerle al mundo hoy el mensaje de Don Bosco?
¡El sueño de Don Bosco a los nueve años es un mensaje relevante también para el mundo de hoy! Darle atención a los otros no exige tener poderes sobrenaturales: es suficiente ser uno mismo con la guía de Jesús y de María.
