La tipografía participó de inmediato en la escuela, publicando numerosos volúmenes y diccionarios. En 1876 Don Bosco fundó también una "sucursal" en Génova-Sampierdarena y en agosto de 1877 lanzó el Boletín Salesiano.
Después de los primeros días del taller, se construyó la primera Tipografía real en 1883, donde se produjeron las ediciones que normalmente se imprimían fuera de Turín.
La imprenta estuvo en funcionamiento hasta 2012, año en que se cerró, el día siguiente a las celebraciones por el 150 aniversario de su fundación.
Desde 2013 se exhiben máquinas antiguas, para recrear el ambiente de la imprenta, como era en la época de Don Bosco.