En su discurso especial, el Superior de la Visitaduría Salesiana a Haití (HAI), P. Jean Paul Mésidor, dijo: “Hoy estamos contentos de encontrarnos en una situación en la que podemos seguir creyendo en el futuro. Si el presente es incierto, nuestra presencia aquí para la inauguración de ENTEC expresa nuestra determinación de seguir mirando al horizonte para descubrir este rayo de esperanza que nos hará soñar con un Haití diverso y hermosos, especialmente para los niños y jóvenes. Es este el optimismo, de tener la oportunidad de hacerlo cada día de la mejor manera es lo que ha caracterizado el trabajo de los Salesianos en Haití durante 85 años”.

De hecho, los Salesianos de Don Bosco en Haití, en línea con su compromiso con el Estado haitiano, con la ley del 5 de junio de 1935, siguen siendo un socio fiable del Estado haitiano en el campo de la formación profesional. Por esta razón, los Salesianos se proponen continuar su colaboración con el Estado, a través del Ministerio de Educación Nacional y Formación Profesional y del Instituto Nacional de Formación Profesional, para mejorar la calidad de la enseñanza técnica y profesional en Haití, en el marco del plan estratégico de desarrollo del país y de la nueva ley sobre la formación profesional, y más concretamente en el ámbito de la formación de los formadores técnicos y profesionales.

La misión principal de ENTEC es formar formadores, actualizándolos para dotarlos de sólidas competencias pedagógicas aplicables a la formación técnica y profesional. El objetivo es crear un cuerpo permanente de formadores a todos los niveles, y que sean capaces de proporcionar el máximo rendimiento y eficiencia interna de las instituciones en los sectores técnico y profesional.

Para promover la mejora de la formación técnica y profesional de los jóvenes en Haití, los Salesianos reciben el apoyo de amigos internacionales, entre ellos la cooperación española, la ONG “Jóvenes y Desarrollo" y la comunidad de Madrid.

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