El Rector Mayor exhortó a los novicios ser simples y sencillos, les recordó que la llamada a la vida salesiana es un compromiso orientado al servicio, no a la búsqueda de prestigio. "El mayor honor para un salesiano es ponerse al servicio de los demás" – les recordó.
El P. Artime también animó a los novicios a vivir los valores del Evangelio, para ser salesianos auténticos y convertirse en una luz para los jóvenes, especialmente para los más pobres. "El valor muy grande para la vida de un salesiano es el amor a Dios y amor a los jóvenes. Estas son las dos caras de la misma moneda".
La reunión finalizó con la entrega de obsequios y con la entrega simbólica al Rector Mayor de un vestido tradicional de Ghana, un traje llamado: "Nana".