El P. Á. F. Artime, explica que la fecha del 08 de diciembre, es el recuerdo de una aventura de Dios y del encuentro de Don Bosco con Bartolomé Garelli, y enfatiza que “es un día muy significativo para hacer una llamada misionera 'ad gentes' en todas las Inspectorías del mundo y a todos los hermanos que se sientan llamados por el Señor a vivir nuestra vocación salesiana de esta manera particular”.
“Mi llamada misionera quiere resonar también en los corazones de muchos hermanos – continúa el Rector Mayor – en todas las Inspectorías y presencias salesianas del mundo, esperando respuestas generosas… Yo, en su nombre, hago una fuerte llamada a todos aquellos hermanos que sienten en su corazón este deseo suscitado por el Señor”.
El motivo del llamado misionero es sin duda, el mismo que impulsó a Don Bosco, el sacerdote celoso que se sintió llamado por Dios para ayudar en la salvación de los jóvenes y cumplir esta misión universal, intentado leer los signos del tiempo. Y actualmente el signo concreto que los salesianos debemos leer es que “nos siguen esperando los adolescentes y jóvenes, y entre ellos los más pobres, abandonados y en peligro” en muchas partes del mundo.
El Rector Mayor indica en particular tres necesidades: aumentar el número de misioneros enviados por todo el mundo cada septiembre con la Expedición Misionera Salesiana; aumentar la solidaridad fraterna entre las diferentes Inspectorías y Visitadurías; ocuparse de áreas específicas que tienen necesidades particulares (misiones de la Amazonia, campos de refugiados en Uganda, Europa del Este, nuevas presencias en Malasia y Gambia...)
“Hago esta fuerte llamada invitando a la generosidad”, concluye el Décimo Sucesor de Don Bosco.
El texto completo de la carta se encuentra disponible en el sitio www.sdb.org