El Consejero visitó las comunidades salesianas del país, siguiendo el programa establecido por el Superior de la Visitaduría y su Consejo. En todas las comunidades, se llevó a cabo una preparación preliminar de la visita. “Los hermanos han sido muy abiertos, acogedores y serviciales para hacer posible y agradable la visita” manifestó el P. Chaquisse.
Cabe recordar que el Consejero tuvo que interrumpir su visita del 07 al 16 de octubre para asistir a la Conferencia de las Inspectorías y Visitadurías de África -Madagascar (CIVAM) en Roma.
En su discurso conclusivo, después de agradecer a los hermanos salesianos de Haití el P. Chaquisse hizo hincapié en “la experiencia dramática el 12 de enero de 2010 que golpeó la historia y el crecimiento de la Visitaduría con el terremoto que destruyó gran parte de la ciudad”.
El Consejero para África-Madagascar elogió el compromiso, la fidelidad a la disciplina religiosa y el estilo sobrio de vida de los salesianos, y de acuerdo con la realidad laboral. En particular, destacó la presencia de varios salesianos en áreas más difíciles y marginales. Alabó el papel de la Fundación Rinaldi, la Oficina de Planificación y Desarrollo, que lleva a cabo un buen trabajo de coordinación, acompañamiento y capacitación a lo largo de la Visitaduría. Al mismo tiempo, señaló que todavía hay trabajo por hacer para consolidar algunas de las prácticas de gestión y organización de cada casa salesiana.
Finalmente, el P. Chaquisse dio a los salesianos algunas recomendaciones para continuar cumpliendo la misión salesiana a Haití.
Por otra parte el P. Jean-Paul Mesidor, Superior de la Visitaduría de Haití, dio las gracias a Dios por la Visita Extraordinaria, y definió como una ocasión de gracia y de renovación para nutrir la vida de las comunidades de la Visitaduría y para servir mejor a los jóvenes.