Al llegar a Dakar en 2009, Ahmed vivía con sus hermanos mayores en el distrito de Apecsy, junto al mar, y trabajó como aprendiz en una sastrería. Durante 10 años ha crecido en malas condiciones, en una "escuela", dirigida por un "Marabut" que los obligaba a Ahemd y a sus compañeros a mendigar para conseguir una cuota diaria requerida para mantenerlos y golpeados si no lograban conseguir.
Ahmed perdió a su padre hace unos años y manifiesta que su madre tiene muchas esperanzas en él. Para no decepcionarla se ha comprometido a aprender un oficio e incluso a aprender el francés. Muchos jóvenes senegaleses no lo hablan, ya que en Daara solamente estudian árabe.
Actualmente Ahmed se inscribió a curso de alfabetización organizado por el Centro Don Bosco, que ofrece a muchos jóvenes lo que aumenta las posibilidades de empleo. Pero el curso de alfabetización es solo un primer paso. A Ahmed le gustaría asistir a un curso profesional, por la noche, de esta manera poder tener un su trabajo durante el día.
Ahmed tiene un sueño: convertirse en un buen sastre y un gran comerciante. Carece de dinero para empezar, pero no dejar de soñar y de empeñarse. Él no quiere decepcionar a su madre, menos a sí mismo.
Ahmed es solo uno de muchos jóvenes por el que los Salesianos y los operadores trabajan en la campaña “Stop a la trata de personas”. Se trata de seres humanos que, gracias al esfuerzo de “Misiones Don Bosco” y del “Voluntariado Internacional para el Desarrollo” (VIS), está trabajando para sensibilizar a los potenciales migrantes sobre los riesgos del viaje y promover proyectos de desarrollo en el lugar.
Para más información: www.stoptratta.org