Para comprender mejor la situación de sus hermanos y de la Familia Salesiana local, el Padre Maravilla visitó las comunidades de los Salesianos de Don Bosco y de las Hijas de María Auxiliadora en las ciudades de Anisakan y Mandalay. La mayor parte de su tiempo fue dedicada al diálogo y la escucha de religiosos y religiosas. Y a pesar de las restricciones impuestas por la actual situación sociopolítica, el 6 de agosto todas las comunidades de la Visitaduría estuvieron representadas en la Asamblea Inspectorial de un día completo realizada con ocasión del 20° aniversario de la fundación de la Visitaduría.

Por la mañana, el Padre Maravilla ofreció una conferencia y por la tarde otra sobre temas misioneros, ambas seguidas por debates en grupo que llevaron a propuestas concretas presentadas al Inspector y a su Consejo. El punto culminante de la celebración fue la Eucaristía comunitaria vespertina.

En la homilía, el Consejero General para las Misiones animó a sus hermanos “a ser fuertes, con la convicción, basada en nuestra fe cristiana, de que el mal nunca tendrá la última palabra. Aunque ahora debamos sufrir, estamos seguros de que al final la verdad vencerá a la mentira, Dios triunfará sobre el mal”. “Esta es la fuente de nuestra fuerza interior”, añadió, “que nos hace Salesianos portadores de esperanza para nuestro pueblo, duramente martirizado”. La jornada concluyó con un momento de ágape fraterno.

Durante su visita, el Padre Maravilla también se reunió con el Consejo Inspectorial para tratar cuestiones relevantes relacionadas con la vida y la actividad de los Salesianos de MYM en esta difícil situación.

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