José Anibal Mendonça nació en Murça, Portugal, el 10 de julio de 1967. Hizo el noviciado salesiano en Vilarinho, donde emitió los primeros votos el 8 de septiembre de 1985. Tras completar su formación inicial entre Portugal e Italia, con estudios teológicos en Turín-Crocetta, emitió los votos perpetuos el 18 de julio de 1992 en Vila do Conde, y fue ordenado sacerdote en Oporto el 10 de julio de 1994.
Sus primeros destinos pastorales como sacerdote recién ordenado fueron los de Consejero en Manique (1994-95) y Vicario (1995-97) y luego Ecónomo (1998-2000) en el Prenoviciato de Oporto. De nuevo consejero en Manique (2000-03), fue director en Poiares da Régua (2003-09) y en Manique (2014-2017).
A lo largo de los años también ha servido a la Inspectoría 'San Antonio' de Portugal (POR) con diferentes responsabilidades: Consejero Inspectorial durante dos trienios (2009-15), Delegado de Pastoral Juvenil (2009-15), Animación Deportiva (2009-11) y Pastoral Vocacional (2011-15), y finalmente Inspector, siendo instalado en ese cargo en julio de 2017.
Al anunciar la noticia del nombramiento del Padre Mendonça para los Salesianos de la UPS, el Vicario del Rector Mayor, Padre Stefano Martoglio, rindió homenaje al Padre Kanaga por su servicio: "Nuestro agradecimiento al Padre Maria Arokiam es grande, por su compromiso y la disponibilidad mostrada al Rector Mayor al aceptar este servicio y llevarlo adelante. Le acompañamos con la oración agradecida y la cordialidad fraterna".
Por su parte, el Padre Kanaga también quiso despedirse de sus hermanos de la UPS con una sentida carta, en la que escribió, entre otras cosas: "Al concluir la CG28, el Rector Mayor me había pedido que asumiera este encargo por un período de tres años. Después de dos mandatos de seis años como Consejero Regional para Asia Sur, no era fácil aceptar inmediatamente otra responsabilidad exigente. Pero obedeciendo al Rector Mayor, llegué con alegría a vuestro medio. He encontrado una acogida gozosa y llena de fe por vuestra parte. Aquí, en medio de vosotros, me he sentido feliz y sereno... He venido con sencillez y esperanza, sin ninguna pretensión de competencia. Ahora me voy con sincera gratitud y alegría. Aquí he recibido del Señor gracias incalculables e inesperadas, especialmente la oportunidad de vivir entre grandes hermanos salesianos, sostenidos por vuestro amor y aprecio con comprensión hacia mis limitaciones. Los roles cambian, pero las relaciones continúan. Cuento con vuestras oraciones y ayuda".
Ahora el Padre Kanaga podrá disfrutar de un tiempo de formación, sin regresar inmediatamente a su Inspectoría de origen. "En su bondad, el Rector Mayor me ha concedido, a petición mía, un tiempo para la formación permanente personal. No había tenido una oportunidad semejante desde mi ordenación en 1986. Considero este breve período como una gracia", concluye el Padre Kanaga.