Las actividades de las Jornadas Salesianas de la Comunicación (GCS) se desarrollaron según lo previsto y exploraron el tema guía “Ser cristiano en un mundo que cambia”. En las primeras horas de la tarde del viernes, el padre Giulio Albanese, misionero comboniano y periodista, presentó a todos los presentes el Mensaje del Santo Padre para la Jornada Mundial de las Comunicaciones 2022, sobre el tema "Escuchar con el oído del corazón".
“Necesitamos conocer y comprender la complejidad del mundo como una aldea global, siempre confrontando la realidad. Debemos tener el coraje de sentir el sufrimiento, de seguir buscando para creer, para esperar y para amar, sin desistir en la lucha. En tiempos de post-Covid-19 y de guerra, y no sólo, es necesario apostar una vez más en la formación, la cultura, la escucha-diálogo. La comunidad cristiana, como de hecho todas las agencias educativas en el sector, tiene la tarea de promover el ejercicio del pensamiento, influenciado e iluminado en la fe, por el Espíritu Santo”, dijo el misionero y periodista.
Posteriormente, los participantes hicieron algunas preguntas para profundizar y luego se dividieron en grupos para reflexionar juntos sobre algunos temas generales, previamente identificados, relacionados con la vida cristiana en cuanto jóvenes religiosos, a la luz del lema que guió las Jornadas Salesianas de Comunicación de este año.
La tarde continuó en asamblea intercambiando las experiencias vividas en los grupos de trabajo, así como de los compromisos adquiridos. Por la tarde, después de un momento de oración a cargo de los novicios SDB y de un tiempo de ágape fraterno, se proyectaron algunas videoentrevistas realizadas por los jóvenes en formación con otros jóvenes de su edad y se discutió sobre el valor de la fe y de la vida cristiana en el mundo de hoy.
La jornada terminó con el pensamiento de las "buenas noches salesianas" ofrecido por el padre Maria Arokiam Kanaga, Superior de la Visitaduría "María Sede de la Sabiduría" de la UPS. En la ocasión, el padre Kanaga subrayó la importancia de que cada miembro de la Familia Salesiana sea un "comunicador de la alegría que viene de Dios", y también invitó a cada uno de los presentes a vivir de tal manera que cada persona que lo o la encuentre pueda reconocer en él o ella, como en el apóstol Juan, "al discípulo amado".
En cambio, el sábado por la mañana la jornada comenzó con la Eucaristía, animada por las jóvenes FMA y presidida por el padre Gildasio Mendes. En la homilía, el Consejero General de Comunicación observó cómo en este tiempo pascual el Evangelio de Juan presenta a Jesús que se aparece a sus discípulos junto al mar, lugar de trabajo de aquella comunidad de pescadores, y subrayó cómo los apóstoles, sin Jesús, no pueden atrapar nada.
En efecto, es Jesús quien les enseña una nueva forma de "echar las redes". Todo esto, aclara el padre Mendes, se aplica también a Internet: hay que seguir el método de Jesús de usar la red, que es el método del Buen Pastor y Comunicador y que permite "habitar en el mundo digital y virtual sabiendo escuchar, dialogar y acompañar por los caminos de la vida y de la fe, manteniendo una actitud de apertura y misericordia”. A continuación, el Consejero general para la Comunicación señaló a los jóvenes SDB y FMA, las figuras de Don Bosco y Madre Mazzarello, que supieron seguir el ejemplo y el método de Jesús, y que gracias a su fidelidad a Cristo, a los jóvenes y a la Iglesia, se han convertido en un ejemplo que se debe imitar. “Hoy nos toca a nosotros continuar el camino de ellos”, concluyó el padre Mendes.
Después de la Misa, las actividades continuaron con una sesión de talleres paralelos, nueve, sobre una gran variedad de temas, comisariados y animados por expertos en sus respectivos sectores y de gran relevancia, todos vinculados a la vida y a las dificultades que enfrenta una joven o un joven cristiano de hoy.
O sea, el testimonio cristiano de paz, ecología integral, los desafíos de la identidad de género, los escándalos en la Iglesia, la creatividad en la liturgia, el imaginario religioso presentado en las plataformas audiovisuales, la relación entre las personas consagradas y la red, la actualidad realidad del universo juvenil y la credibilidad del individuo.
En cuanto fueron días dedicados a la comunicación, no podía faltar un tiempo adecuado dedicado a escuchar y evaluar las actividades de los participantes: un feedback necesario para hacer auténtica la comunicación y para perfeccionar cada vez más, con el paso de las ediciones, esta iniciativa de las Jornadas Salesianos de Comunicación, que comenzó hace 10 años.
La experiencia terminó con un momento de ágape fraterno y las opiniones recogidas testimonian una satisfacción general con una oferta de formación en comunicación más necesaria hoy que nunca, además del pedido de profundizar y estructurar itinerarios y vías sobre el tema.
