Payal Kumari es una estudiante del instituto femenino “Mar Thoma” de Perumbavoor, en el estado de Kerala, donde vive desde hace años con su familia. Siempre se ha distinguido en los estudios y es muy apreciada por los docentes que la siempre la han guiado y apoyado.
Su padre se llama Pramod, es un trabajador jornalero originario del estado de Bihar, que por trabajo se transfirió a Kerala. Siendo joven tuvo que abandonar la escuela precozmente y justamente por ello ahora lucha para que sus hijos reciban una instrucción adecuada.
Con la llegada de la pandemia y el consecuente confinamiento, los problemas para Payal aumentaron. Después de haber enfrentado la desconfianza de la población local, la falta de instrumentos básicos y de documentos, llegó también el ansia, el miedo y la desilusión por no poder tener acceso a la educación a causa de la falta de dispositivos idóneos para la didáctica a distancia.
Así ha intervenido el proyecto “KISMAT”, que en sus actividades ha identificado a 314 niños y jóvenes migrantes que estudiaban en las escuelas estatales y que no tenían ninguna posibilidad de frecuentar lecciones online. De acuerdo a las necesidades les fueron entregados smart tv, smarphone, libros de texto, cuadernos y paquetes con el kit de alimentos.
Payal era una de esos 314 jóvenes identificados para ser asistidos. Y gracias al apoyo recibido ha obtenido la licenciatura de primer nivel en el curso de Arqueología e Historia, en la “Mahatma Gandhi University” de Kerala en el 2020, resultando una de mas mejores estudiantes del propio curso de estudio.
Payal reconoce con orgullo: “El resultado que he conseguido fue gracias a mi padre, que trabajó duramente para lograr suplir a las necesidades, debiendo así enfrentar muchas dificultades en la vida, pero nunca quiso aceptar compromisos sobre la educación de sus hijos”.
A pesar de todas las dificultades enfrentadas por el solo hecho de ser hija de un inmigrante, Payal Kumari nunca se desanimó. Ahora querría conseguir un doctorado en Historia y Arqueología y también prepararse para los exámenes del servicio civil.
Don Bosco KISMAT se muestra satisfecho de haber apoyado a Payal en sus estudios y ha presentado a la joven como ejemplo de vida y fuente de inspiración para muchos niños y jóvenes migrantes que no logran ver oportunidades más allá de aquellas que la vida les ha puesto delante.