Es un año dificilísimo para las familias de Dagoretti. Aún antes que Kenia señalara en la mitad de marzo los primeros casos de covid, el país ya enfrentaba una invasión de langostas y la pandemia empeoró aún más la situación social y económica. En las últimas semanas los casos de coronavirus aumentaron y Kenia tiene ahora las cifras más altas de África oriental, con Nairobi que es el área más golpeada.
La pandemia de Covid-19 en Kenia es mucho más que una crisis sanitaria, ha creado crisis social, económica y políticas devastadoras, que podrían dejar profundas cicatrices en muchas personas y especialmente en los grupos vulnerables. Muchas actividades fueron cerradas y tantas personas están ahora sin trabajo ni rédito. En Dagoretti, muchos pobres viven al día, buscando trabajos ocasionales y a veces peligrosos con tal de poder comer. Falta el agua potable, el aforo en las barracópolis vuelve imposible el distanciamiento social, las escuelas están cerradas y los niños no tienen acceso a la instrucción.
"Nosotros salesianos de Don Bosco en Dagoretti vemos que cada día golpean nuestra puerta familias pobres que buscan ayuda. Con los fondos que recibimos de nuestros donantes - explica sor Purity Ndiwiga, FMA - hemos buscado de ayudar a algunas de las personas más vulnerables. En mayo de 2020 hemos distribuido paquetes de alimentos, jabones, desinfectantes y mascarillas a unas 300 familias. Esta distribución de paquetes fue posible gracias a personas de buena voluntad, a quienes les agradecemos".
Sor Purity dirigió además un pensamiento hacia los otros países del mundo que están enfrentando la pandemia: "Nos acongoja el hecho de que el continente europeo, en las tierras de nuestros benefactores se esté sufriendo a causa del coronavirus. Los niños, las mamás y sus familias tienen el corazón destrozado cuando nos llegan estas tristes noticias. Reconocemos todo lo que nuestros benefactores significan para nuestra educación y otras necesidades fundamentales, creemos que el mayor apoyo que podemos ofrecer desde este extremo de África sea el de dirigir la mirada a nuestro Creador, con el corazón lleno de confianza".