La reflexión se inspira en la famosa pregunta de Don Bosco en su carta de Roma de 10 de mayo de 1884 “... ¿Dónde están nuestros salesianos?” Y la actualiza en la realidad de los jóvenes de hoy, para promover una actitud pastoral realista que incluya una profunda visión en las tendencias culturales típicas de nuestra sociedad.
En particular, hay que tener en cuenta tres características de la cultura juvenil de hoy, afrontando por todo salesiano: se trata de un mundo de contradicciones, de un mundo de desconexiones y un mundo de derechos.
Esta nueva realidad está a gusto con la diversidad, una diversidad que está destinada a permanecer: las personas se llevan bien, a pesar de que son diferentes en edad, género, etnia, orientación sexual, condición social, creencias ... Ciertamente, esto ha implicado también una mayor tolerancia por parte de las personas e incluso por los mismos salesianos.
En la realidad actual - continúa el P. Robleza - la realidad en la que se desarrolla la historia de Dios, y de frente a las tecnologías que nos abruman, existe una gran necesidad de la presencia física del otro, para dar testimonio de la verdad y de los valores. Esto se traduce en la necesidad de ser profetas creíbles, como Don Bosco y como sus Salesianos.
En el tiempo de las contradicciones y de las desconexiones, existe la búsqueda de integridad y de honestidad. De hecho, en tiempos rápidos en los que la sociedad actual busca soluciones simples y de bajo costo, la respuesta es pasar más tiempo cultivando las relaciones con los demás y con Dios. “La contemplación es el camino a seguir”, sugiere el P. Robleza.
Se nos invita a convertirnos en profetas de un mensaje contracultural en medio de los jóvenes que viven inmersos en la tecnología. Los jóvenes esperan que los salesianos sean tolerantes, auténticos y valientes. De esta manera seremos capaces de promover la cultura del encuentro personal.
El texto completo de la reflexión está disponible en inglés.