Por: Lorenzo Montanaro
Inmediatamente, el "santo de los jóvenes" trabajó con una perspectiva internacional, que se acentuó con el tiempo. Actualmente está vivo en cincuenta países, y “Missioni Don Bosco” ha realizado 1.775 oratorios y centros para niños, 270 obras especiales para los jóvenes en dificultad y más de 1.000 escuelas, así como acueductos, enfermerías, farmacias, hogares para personas sin hogar , leprosorios, guarderías y dispensarios médicos. Por lo tanto, hay miles de ‘Valdoccos’, donde los jóvenes de todos los orígenes, pero especialmente los más desfavorecidos, pueden jugar, estudiar y encontrar personas dispuestos a ayudarlos seriamente.
El Sr. Giampietro Pettenon, salesiano coadjutor, Presidente de “Missioni Don Bosco” visitó recientemente el Oratorio Salesiano situado en el interior de la cárcel de menores en Antananarivo, Madagascar. “Incluso en una situación extrema - explica - los novicios salesianos pueden hacer Oratorio todos los domingos, y después de la misa ofrecen a los muchachos niños un almuerzo especial, la única plena y abundante comida de la semana. Luego, organizan una tarde de grandes juegos”.
En Madagascar los muchachos llegan a las cárceles por delitos menores. Casi todos los 100 delincuentes jóvenes, entre 8 y 18 años de edad, están en prisión por delitos insignificantes. “Los salesianos están trabajando para mejorar las condiciones de vida en las instalaciones, y también para ofrecerles una alternativa a la delincuencia”.
En todo el país surgen las escuelas y los centros de formación profesional de parte de los salesianos y preparan a los futuros carpinteros, albañiles, soldadores, electricistas, agricultores y expertos ganaderos. El futuro de estas comunidades siempre estará en riesgo porque dependen de los aportes externos y para ello los salesianos trabajan para que sean autónomos. Un ejemplo concreto es que a 80 km de la ciudad de Mahajanga, los salesianos compraron 96 hectáreas de terreno y ahora están empezando una gran empresa sostenible de arroz: “un tercio de la producción servirá para alimentar a los 3.500 niños que asisten a la obra salesiana, el resto será vendido, de manera que las personas que trabajan en el proyecto puedan tener un mínimo de aporte económica”, expresa el Sr. Pettenon.
Fuente: Familia Cristiana