¿Cómo te han formado los 3 años transcurridos en el Posnoviciado internacional de Moshi en Tanzania?
Puedo decir con certeza que me han hecho crecer y fortalecerme en varios aspectos: humano, intelectual, espiritual y pastoral. En la comunidad de Moshi éramos más de 60 salesianos, por lo que en la vida diaria se necesitaba gran cuidado fraterno y una fuerte colaboración.
No todo fue tan fácil como yo pensaba. Un día yo era feliz por los buenos resultados académicos, pero al día siguiente podía decepcionarme y hasta enfadarme por algunos comportamientos que no podía compartir. Sin embargo, me di cuenta de que Jesús no quiere cosas que no puedo darle. Nos ha dicho: Ven conmigo como eres, aunque seas pobre y no tengas nada, tráeme lo que tienes. No importa lo poco que tengas, todo lo que tienes lo usaré para los otros.
Uno de tus compañeros de noviciado, el salesiano Abuto, hará un recorrido opuesto al tuyo. De Kenia irá como misionera ad gentes al Japón. ¿Qué piensas de esta decisión?
Estoy muy contento con la noticia. En el Japón podrá encontrarse con personas dedicadas al dinero, a la ganancia, al placer y al poder... Me gustaría que fuese compasivo con ellos, compartiendo sus sufrimientos. En mi opinión, Japón necesita más que nunca el amor misericordioso de Cristo. Muchas personas se sienten vacías, la brecha entre ricos y pobres se hace cada vez más grande y son unas veinte mil personas que se suicidan cada año. Si Abuto está dispuesto a ponerse en las manos del Señor llevará amor, paz y alegría en los corazones de las personas, especialmente de los pequeños.
¿Deseas enviar un mensaje a los jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano y a los aspirantes salesianos de Japón?
Quiero decirles que los admiro en primer lugar. Cuando era estudiante en el Japón, no pensaba en la religión ni en dedicarme a los otros, solamente buscaba mi bien personal. En cambio ellos han percibido el misterio de la vocación cristiana. Espero que, por intercesión de María Auxiliadora y de Don Bosco, todos podamos estar más cerca de Jesús entre los más necesitados que los encontraremos todos los días.
