Por: P. Guillermo Basañes, SDB
Consejero general para las misiones
Muchos materiales para la animación se encuentran disponibles en Internet para enfocar el trabajo específico en los Centros de Formación Profesional y se pueden visualizar los vídeos y escuchar los testimonios de Salesianos Coadjutores como Luigi Parolin (misionero en la Inspectoría de FIN), Andrew Phuong (misionero en Mongolia, Inspectoría VIE), Roberto Panetto (misionero en Camboya, Inspectoría THA) y Carlo Bacalla (misionero en Laos, Inspectoría THA).
El enfoque puesto en los Centros de Formación Técnica y Profesional (120 en la región de Asia Sur y 60 en la región de Asia Este-Oceanía) permiten mostrar el corazón del carisma salesiano, donde la educación transforma la vida de los jóvenes pobres y “susurra el Evangelio” a sus almas.
Toda la oferta para la animación de la JMS incluye cuatro recursos: en primer lugar se han realizado cinco vídeos en línea (www.missionidonbosco.org) sobre jóvenes de Centros de Formación Profesional – una introducción y 4 videos de la realidad Salesiana en Sri Lanka , Nepal, Laos y Vietnam. Todos estos recursos se encuentran disponibles en 5 idiomas.
En segundo lugar, se ha presentado un afiche. Además se ofrece un folleto de 44 páginas, con materiales disponibles para la animación, la reflexión y la formación misionera en las comunidades locales. Y, por último, una pequeña postal con la oración por el JMS2018.
Por último, pero no menos importante, es el “Proyecto JFS2018”, cuyo objetivo es ayudar a la obra salesiana “Don Bosco Myitkyina”, ubicado en la parte norte de Myanmar, que ayuda a jóvenes tóxico dependientes y aquellos que han quedado de los enfrentamientos armados en el Estado de Kachin.
Todos los salesianos y miembros de la Familia Salesiana están invitados a rezar con fe la oración por la JMS 2018. ¡Acogemos este precioso don y oportunidad, para susurrar el Evangelio!
Oración:
Dios Todopoderoso,
Creador del Cielo y de la Tierra,
que te revelaste a Elías
no en el viento violento,
no en el terremoto,
ni en el fuego,
sino en el suave susurro de la brisa.
Haznos dóciles a la voz del Espíritu para
Anunciar el corazón del Evangelio
al corazón del continente asiático.
Que el armonioso y alegre rumor
de la educación al trabajo
dignifique la vida de nuestros jóvenes
y los abra al encuentro
con Jesús, el “Carpintero de Nazaret”.
Amén.
