“Educar a los jóvenes en la sexualidad, el afecto y el amor en una sociedad moderna donde coexisten visiones rígidas sobre la sexualidad y la liberación es, sin duda, una tarea desafiante. Sin embargo, creo que este es el camino a recorrer para experimentar y transmitir plenamente el amor de Dios”, compartió uno de los participantes.
Los presentes hicieron eco de las palabras del papa Francisco, recordando su exhortación apostólica en Christus Vivit (81), que afirma: “Los jóvenes reconocen que el cuerpo y la sexualidad son esenciales para su vida y para el crecimiento de su identidad”. Reconocieron también la necesidad vital de cultivar las cualidades de educadores en materia de sexualidad, esenciales para ellos como futuros salesianos pastores.
Además de la investigación, la reflexión y el intercambio que se desarrollaron en un ambiente siempre vivaz y auténtico, cada día del seminario fue enriquecido por elementos especiales. El primer día, 14 de diciembre, en la semana dedicada por la Conferencia Episcopal Coreana a la Doctrina Social, los formandos salesianos participaron en una manifestación para condenar las acciones que atentan contra la dignidad y el valor del ser humano según las enseñanzas del Evangelio.
El segundo día, el 15 de diciembre, estuvo marcado por la visita de un aspirante, Andrew Kim Min-seong, en servicio militar. Por la tarde, una animada partida de fútbol, llena de entusiasmo y gritos juveniles, elevó el ánimo de los participantes.
El tercer día, 16 de diciembre, se ofreció un cálido saludo a algunos formandos que avanzaban en su camino: Dominic Kim Hyun-ki, quien concluyó el recorrido de la formación inicial; el clérigo Gabriel Kim Seon-woo, que ahora completará sus estudios en la UPS; y Francis Jeong Hoe-in, quien viajará a Manila, en Filipinas, para prepararse para sus futuros estudios.
El último día, el 17 de diciembre, durante la eucaristía de clausura, cinco clérigos –Paul Kang Kyung-mo, Moses Jeong Min-soo, Paul Choi Jun-mo, Peter Yoon Si-mon y Andrea Shin Hyeong-joo– recibieron el ministerio del lectorado, entrando públicamente en una nueva fase de su camino hacia el sacerdocio.
El seminario invernal para jóvenes en formación inicial no fue solo una experiencia de aprendizaje académico, sino también un momento para reforzar aún más la fraternidad y el sentido de comunidad. Aunque el programa fue breve, los participantes reflexionaron profundamente y compartieron los intensos temas de la fe y el amor, confirmando una vez más la belleza de la vida fraterna comunitaria.
Moses Jeong Min-soo