De sus casi ochenta y tres años de vida, el Padre Zago (1935-2017) pasó sesenta y dos como misionero, sirviendo a los jóvenes de India, Indonesia, Timor Oriental, Filipinas, Papúa Nueva Guinea y finalmente Pakistán, donde pasó los últimos dieciocho años de su vida, fundó las dos obras actualmente presentes en el país (Quetta y Lahore) y contribuyó arduamente al apoyo de refugiados y pobres y a la reconstrucción de los pueblos después del terremoto de 2005 y las inundaciones de 2010.
Con su iniciativa, junto con la de sus compañeros de misión, el Padre Zago influyó profundamente en la vida de innumerables niños en Pakistán. Y hoy su legado sobrevive a través de estas instituciones, que continúan encarnando su dedicación y amor por la educación y los menos privilegiados.
El pasado diciembre, la Federación Nacional de los Exalumnos tuvo la oportunidad de visitar Quetta para establecer las elecciones de la Unidad Local y durante este viaje realizó también una visita a Ziarat, un distrito de Quetta, para visitar otra escuela allí situada, también iniciada en los primeros años 2000 por el Padre Zago.
“Todos nos sentimos profundamente conmovidos por la cálida acogida y el evidente impacto del trabajo del Padre Zago –testificó el señor Asif Boota, Vicepresidente Nacional de los Exalumnos de Pakistán– Pero el discurso de apertura pronunciado por el Director de la escuela nos reveló una situación inesperada y desgarradora: la escuela estaba en riesgo de cierre por insuficiencia de fondos”.
La noticia fue un jarro de agua fría para todos los presentes, incluido el Sr. Francis Nhat (SDB), Delegado Salesiano para la Unión Local de los Exalumnos de Quetta. Después del desconcierto inicial, el Sr. Boota intentó profundizar en las posibilidades de intervención junto con el Director de la casa de Lahore, Padre Noble Lal, el Presidente de la Unión Local de los Exalumnos de Quetta, Sr. Awaish Yousaf, y el Director de esta obra, Padre Samuel Ghouri.
Así, ahora, por propuesta precisamente del Padre Ghouri, la Federación Nacional de los Exalumnos de Pakistán está trabajando para desarrollar un sólido plan operativo que le permita asumir la responsabilidad de la gestión de esta escuela y explorar las maneras de prevenir el cierre de esta institución vital para los jóvenes de Ziarat y de toda Quetta.
“Ahora estamos formulando y discutiendo el plan con la comunidad salesiana y todos nosotros estamos determinados a honrar al Padre Zago garantizando que esta escuela permanezca operativa y continúe proporcionando una educación de calidad a los niños de Ziarat. Reconocemos la profunda importancia de este centro y nos comprometemos a movilizar recursos para sostenerlo” testificó el Sr. Boota.
Así, actualmente la Federación Nacional de Exalumnos de Don Bosco en Pakistán prevé firmar un contrato detallado que prevea la toma de posesión de la gestión de la escuela de Ziarat por un año, sobre la base del respeto de ciertos parámetros. Posteriormente, la Federación Nacional confiaría la gestión de esa escuela a la Unión Local de los Exalumnos de Quetta, continuando, sin embargo, a monitorear todas las actividades.
Para esto, concluye el Vicepresidente Nacional de los Exalumnos de Pakistán: “Con este acuerdo no solo se honraría el legado del Padre Zago, sino que también se garantizaría la continuidad de la educación y el servicio a los menos privilegiados de Ziarat y de Quetta. Estoy seguro, señor, de que juntos podremos sostener la misión de Don Bosco y la querida memoria del Padre Pietro Zago, asegurando que su visión de educación y servicio a los menos privilegiados continúe”.
