Una vez más este año se pudo ver cómo María, Madre de la Humanidad, fuente de alegría y apoyo en las tribulaciones de todos los tiempos, no abandona a ninguno de sus hijos, sino que es siempre fuente de afecto y de pensamientos de gratitud en toda su numerosa familia repartida por el mundo.

“Después de la fiesta de María Auxiliadora hemos recogido algunos testimonios de todo el mundo de cómo se ha vivido este feliz aniversario y hemos constatado cómo también este año se ha sentido la unidad y la cercanía al corazón de Don Bosco, que sigue siendo para todos nosotros maestro y amigo, al mostrarnos el camino trazado y sostenido por las dos columnas, es decir, por María y Jesús”, testimonia Chiara Audasso, Vicepresidenta del Consejo de la Asociación de María Auxiliadora (ADMA) de Valdocco.

Al término de lo vivido en estos días de celebración y con el corazón lleno de alegría por las repercusiones que llegan desde todo el mundo, todos los miembros de la Familia Salesiana y en particular de la ADMA -cuya misión es fomentar y difundir devoción a María Auxiliadora- sólo pueden dejar de decir que están agradecidos porque, como decía Don Bosco, "Ella lo hizo todo", y sólo se puede mirar hacia adelante con espíritu de confianza, en la certeza de que también en el futuro "Hará todo Ella!".

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