Desde hace años, de hecho, el padre Mendes ha estado estudiando y profundizando este tema, que se alinea con la Pastoral Salesiana en el mundo de la juventud y en respuesta al llamado del Rector Mayor contenido en la prioridad n. 3 de la Propuesta de Programa: "Vivir el sacramento salesiano de la presencia y vivir en el entorno digital". El tema aquí propuesto correlaciona la comunicación de Don Bosco con la actual, ofreciendo una lectura de los conceptos de fraternidad y amistad social, presentes en la encíclica del Papa Francisco “Fratelli Tutti”. A la luz de esto, el padre Mendes ofrece interpretaciones de Don Bosco y su forma de comunicar, actualizándola para comprender mejor la realidad digital.
¿Cómo surgió la idea de escribir artículos sobre Don Bosco como comunicador con los jóvenes?
Don Bosco es uno de los grandes comunicadores de la Iglesia. Si viviera en la actualidad, tal vez sería el patrón de las redes sociales. Puntualicemos de inmediato que en la época en que vivió Don Bosco no existía para nada una realidad digital y que por tanto, no podía conocer la dinámica de Internet ni de las redes sociales. O sea que no es correcto forzar determinadas relaciones. Lo que queremos hacer aquí es más bien recuperar las intuiciones que tenía Don Bosco sobre la comunicación de su tiempo, como la interactividad comunicativa. Hago un ejemplo: Don Bosco supo combinar juegos, teatro y música, como lo hacen hoy algunas plataformas populares.
¿Qué otros problemas se abordarán?
Se abordarán 12 temas diferentes, entre los que se encuentran: el estudio de la comunicación y el diálogo entre cultura y lenguaje juvenil; un estudio en profundidad de cómo Don Bosco estudió la geografía y cómo aplicó la dimensión espacial en la comunicación; el lenguaje de los sueños como metáfora y narrativa; la autobiografía como arte de escribir sobre uno mismo; la dimensión de la liturgia y la oración; comunicación y santidad.
¿En qué se basan estos estudios?
La base son los estudios de antropología, etnografía digital, neurociencia, psicología de la relación humana, inteligencia múltiple, inteligencia artificial. Naturalmente, también se basa en los valores del sistema educativo de Don Bosco.
¿De dónde aprendió Don Bosco esta dimensión artística?
Don Bosco la aprendió de niño. La dimensión artística está presente en él desde pequeño y en las Memorias del Oratorio vemos de hecho a un Don Bosco que narra su experiencia sobre juegos, música, interactividad, etc.
En el corazón de toda forma de comunicación está la relación interpersonal. ¿Qué nos enseña Don Bosco hoy en este sentido?
Don Bosco intuyó que la experiencia educativa crece donde hay relaciones humanas, empatía y relaciones. Podemos decir que todo esto es el corazón de la comunicación. Don Bosco crea un sistema, casi un ecosistema, basado en las relaciones humanas, sociales e interpersonales.
Hoy hablamos de internet como un hábitat. En cambio, ¿cómo se las arregló Don Bosco para construir un ambiente educativo?
Don Bosco supo valorar los talentos de cada persona; comprendió lo que cada uno podía hacer y lo que podía aprender. Para ello invirtió en aprendizaje, artes, escuelas y centros de formación profesional. Se creó un curso de formación compuesto por compromiso, disciplina y evaluación. Esto creó un ambiente de confianza, entusiasmo y amor educativo. Don Bosco ofreció a cada uno su espacio para colaborar juntos con creatividad y alegría.
¿Cómo opera Don Bosco la fe en Dios y la Virgen en este entorno?
Don Bosco vivió una experiencia en la que Dios es un Don y en la que la fe ofrece una interpretación de la vida como gratuidad. La fe es comunicar, expresar la libertad y la creatividad que surgen del amor de Dios y de la maternidad de María.