A la celebración asistió el obispo emérito de la diócesis de Dalat, Mons. Anthony Vu Huy Chuong; el obispo de la diócesis de Thai Binh, el salesiano Mons. Peter Nguyen Van De; el obispo de la diócesis de Phan Thiet, Mons. Joseph Do Manh Hung; el Superior de la Inspectoría de Vietnam (VIE), el padre Joseph Nguyen Van Quang; el Director del Instituto Filosófico "Don Rúa", el padre Joseph Nguyen Chan Hung; junto con los Salesianos de diversas comunidades, sacerdotes y religiosos y religiosos de diversas diócesis y congregaciones, miembros de la Familia Salesiana.
La ceremonia incluyó una Eucaristía en la capilla del tercer piso del nuevo edificio, presidida por Mons. Dominic Nguyen Van Manh. En cambio Mons. Peter Nguyen Van De pronunció la homilía, en la que compartió sus recuerdos de la fundación del Instituto, señalando que en 50 años se han graduado 330 salesianos de "Don Rúa", de los cuales 106 han servido a la Congregación y a la Iglesia como misioneros ad gentes en 49 países de todo el mundo. “Todo es gracia de Dios”, comentó.
Posteriormente, recalcó que la misión de los salesianos es amar y servir a los jóvenes, especialmente a los abandonados; para ello recordó el lema de Don Bosco "Da mihi Animas, cetera tolle", habló sobre la situación actual de los jóvenes en el mundo y los desafíos de los educadores, e invitó a todos a participar con los Salesianos en el trabajo por la educación, orientación y protección de los jóvenes.
Durante la misa el obispo de Dalat realizó los ritos de bendición de la capilla y el altar.
Al concluir la Eucaristía, el Inspector de los Salesianos expresó su agradecimiento a los obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas que participaron en la jornada, y también envió un agradecimiento especial al arquitecto que diseñó este edificio y a quienes realizaron su construcción sin querer retribución alguna, y a los benefactores que de tantos modos apoyaron la construcción del edificio.
Por su parte, Mons. Dominic Nguyen Van Manh felicitó a la Inspectoría por el nuevo edificio y agradeció a los salesianos la ayuda que han dado y brindan a la Diócesis de Dalat y a la Iglesia en la educación de los jóvenes; por tanto manifestó su deseo de que el nuevo edificio sea un buen lugar para que muchos, especialmente los jóvenes, crezcan y se eduquen según la espiritualidad salesiana.
Sr. Pham hong Phuoc, SDB
Fuente: AustraLasia