Que el centenario de la Carta apostólica Maximum illud “sea un estímulo para superar la tentación recurrente que se esconde en toda clase de introversión eclesial, en la clausura autorreferencial en la seguridad de los propios confines, en toda forma de pesimismo pastoral, en cualquier nostalgia estéril del pasado, para abrirnos en cambio a la gozosa novedad del Evangelio” exhorta el Papa que, acogiendo la propuesta de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, ha anunciado “un mes misionero extraordinario en octubre de 2019, con el fin de despertar aún más la conciencia misionera de la missio ad gentes y de retomar con un nuevo impulso la transformación misionera de la vida y de la pastoral”.
El sitio web oficial del “Mes Misionero Extraordinario” está disponible en: http://www.october2019.va/it.html
Mientras tanto, el sector para las Misiones Salesianas difundió el lema de la Jornada Misionera Salesianas 2019, que se publicó oficialmente el día de la Epifanía: “Sin saber acoger a los ángeles” (Heb 13,2).
Como cada año, la JMS examina un tema específico en una realidad continental determinada, la elección para este año es el “Primer anuncio entre los refugiados y desplazados en África”.
Junto con el lema, los primeros recursos para la animación de la JMS ya se están difundiendo. El poster y las tarjetas con la oración ya se encuentran en camino a las Inspectorías de todo el mundo. En el mes de febrero, se publicarán los subsidios para la animación y para el trabajo con los videos en las 6 lenguas, las más habladas de la Congregación.
Junto con el lema, se empezaron a difundir los primeros recursos para la animación del JMS. El póster presenta a dos muchachas, una de las cuales da la bienvenida a la otra. Es un símbolo del valor de la hospitalidad africana: África acoge a África. “La mayor migración de nuestro tiempo es la intra-africana, a la que se ven obligadas a desplazarse millones de personas”, explica el Sector de la Misión.
En el fondo vemos las realidades de los campos y los asentamientos de refugiados; las actividades pastorales y educativas, especialmente en la formación profesional; y los Salesianos se encuentran presentes con los refugiados y desplazados, para compartir sus vidas.
“El tema coloca nuestra atención en el desafío de esta frontera llena de jóvenes que esperan el aprecio de los Salesianos, el trabajo en sus oratorios, en sus escuelas, en la formación profesional... y en el anuncio de la Buena Nueva de Jesús. El tema -concluye el Sector de Misiones Salesianas - es también una oportunidad para vivir y promover la virtud evangélica de la hospitalidad, esa capacidad de acoger, de abrir nuestras casas, nuestras manos, nuestros corazones a los demás, especialmente a los más necesitados. Al hacerlo y al actuar de esta manera, hospedamos ángeles, acogemos al mismo Dios”.