El cardenal salesiano, muy cercano al Papa Francisco y por ello fue nombrado coordinador del grupo de cardenales, deseaba que lo asesorase en el gobierno de la Iglesia. Lo ha ha manifestado el 27 de abril, durante una reunión organizada por la Pontificia Universidad Lateranense (PUL).
De acuerdo con el rector de la PUL, Mons. Enrico dal Covolo, el evento “se ajusta al itinerario de preparación para el Sínodo" y su objetivo es “aprehender las expectativas de los jóvenes en el mismo Sínodo".
Para el Cardenal Rodríguez Maradiaga, el sínodo es una cobertura completa de todo el universo juvenil, y sobre todo de las expectativas que tiene la Iglesia sobre ellos y su deseo de cambio. El Cardenal ha señalado dos opciones fundamentales para la juventud de hoy. “Por una lado se debe recuperar el protagonismo de los jóvenes” y por otro lado se debe “hacer todo lo posible para que regresen a la comunidad”.
Sobre el primer punto, subrayó que “los jóvenes no son solo números”, sino que deben tener la oportunidad de ser los protagonistas, pero para ser protagonistas deben salir del aislamiento que están relegados, y depende en gran medida de la modalidad comunicativa para crear comunidades en lugar de fomentar la soledad. Y en este sentido – recordó el Cardenal que “una de las características del período post-conciliar es la de hacer crecer la comunidad de los jóvenes, no solamente los grupos de jóvenes, es decir: hacer crecer la comunidad donde compartir la fe, los ideales y los programas de vida”.
De este protagonismo organizado de los jóvenes podrá derivar grandes beneficios para el bien común que es “uno de los principios claves de la Doctrina Social de la Iglesia”. Afirmó además “que hay tantos jóvenes que tienen tantos ideales y tienen el deseo de cambiar la comunidad, y seguramente cambiará la política”.