El objetivo del evento fue agasajar a los abuelitos, para tal motivo se preparó un programa para que los invitados se sientan como en casa. Las actividades iniciaron a las 9 de la mañana. Se ofreció a los ancianos sesiones de fisioterapia, una forma para aliviar sus dolencias físicas y luego se proyectó un video sobre el Cuarto Rey Mago.
Normalmente se realiza una procesión con el “Niñito Jesús”, por las calles vecinas de la Parroquia, pero las lluvias hicieron que la procesión se realizase dentro del templo. Los asistentes vivieron con mucha fe y devoción este momento y entonaron con mucho júbilo los villancicos. Cabe remarcar la presencia de un nutrido grupo voluntarios de la pastoral social, quienes no solo cocinaron, sino representaron a la Virgen María, a San José y a los ángeles.
El P. Ángel Marquina, párroco, presidió la Eucaristía y recordó durante la homilía el significado de cada uno de los regalos entregados por los reyes magos a Jesús e insistió sobre el amor incondicional de Dios a cada persona.
El grupo “Vox Nova” brindó un concierto a los abuelitos y deleitó con varios temas musicales. Dicho concierto fue el preámbulo para ofrecer un suculento almuerzo, preparada con mucho cariño por más de 100 voluntarios de la pastoral social.
Finalizando el evento se entregó una bolsa con víveres, ropa y dulces para que los ancianos participantes puedan compartir en familia.
En una de las alocuciones del Santo Padre, ha manifestado que “Un pueblo que no custodia a los abuelos, ni respeta a los abuelos, no tiene futuro”.
Las actividades que realiza la parroquia están enfocadas en ayudar a los más necesitados y seguir el legado de Don Bosco de trabajar por los más desfavorecidos de la sociedad, sobre todo con aquellos que nadie les da importancia: los ancianos.