RMG – Inspectorías SDB : la Inspectoría “San Juan Bosco” de Filipinas Norte (FIN)

15 Abril 2025

(ANS – Roma) – En un mundo que avanza cada vez más rápido, donde los jóvenes a menudo están abrumados, desatendidos o perdidos en el ruido de fondo, una fuerza humilde sigue ardiendo constantemente: es un fuego que se encendió por primera vez en Valdocco, en Turín, y que ahora arde con determinación en Luzón, en Filipinas. Se trata del fuego que alimenta la Inspectoría salesiana del Norte, “San Juan Bosco” de Filipinas Norte (FIN).

Todo comenzó con un sueño

La misión salesiana llegó a Filipinas en 1951, trayendo consigo el sueño radical y audaz de san Juan Bosco: formar “buenos cristianos y honrados ciudadanos”. Lo que comenzó como una modesta semilla apostólica sembrada en tierra fértil, ha crecido hasta convertirse en una extensa y articulada red de escuelas, parroquias, centros juveniles, casas de formación e iniciativas sociales que ahora se extienden por toda la parte norte del archipiélago filipino.

Hoy, la Inspectoría FIN es una realidad dinámica y vibrante, compuesta por 25 comunidades erigidas canónicamente y por 145 salesianos profesos. Estos hombres – sacerdotes, hermanos, clérigos y novicios – viven su consagración al servicio cotidiano de los jóvenes, de la Iglesia y de la sociedad.

Un perfil en constante compromiso

Según los datos más recientes (de 2024), la edad media de los salesianos de FIN es de 56,79 años. La inspectoría comprende:

118 sacerdotes,

16 coadjutores

y 11 religiosos en formación inicial.

No se trata simplemente de datos estadísticos, sino de vidas entregadas en las aulas, en los confesionarios, en los talleres y en los campos juveniles. Cada Hijo de Don Bosco es un testimonio del legado duradero del Santo de los Jóvenes, en términos de acompañamiento, educación y celo pastoral.

La educación con el corazón

El sistema educativo salesiano, basado en tres pilares – razón, religión y amabilidad – está en el centro de la misión de FIN. Los Centros Educativos “Don Bosco” (DBEC) comprenden los Departamentos de Educación Básica (BED), los Centros de Educación y Formación Técnico-Vocacional (TVET) y dos Institutos de Educación Superior (IES).

Aunque la evolución de las matrículas escolares ha sido fluctuante, especialmente después de la pandemia, las escuelas de FIN son consideradas en general como baluartes de una sólida formación general acompañada de formación en valores. Más allá de la excelencia académica, la inspectoría considera prioritarios el desarrollo del liderazgo juvenil, la formación cultural y la identidad cristiana, a través de iniciativas como las “Boscolimpiadas”, la asamblea de animadores estudiantiles y el Congreso Juvenil de los Exalumnos Salesianos.

Los Centros de Formación Profesional, a menudo considerados “la puerta de entrada de los pobres a la educación”, atienden actualmente a más de dos mil quinientos aprendices. Con programas que van desde la mecatrónica a la mecánica, desde las artes culinarias hasta la preparación para centros de llamadas, estas instituciones ofrecen no solo formación, sino también dignidad. Muchos de estos aprendices provienen de provincias lejanas y para ellos un certificado marcado con “Don Bosco” no es solo una sólida credencial ante un empleador, sino un signo de un nuevo comienzo.

Las parroquias como lugares de creatividad pastoral

Las 8 parroquias y santuarios salesianos de FIN no son simples espacios eclesiales: son casas de pastoral juvenil, evangelización y misión. Programas como la Academia Salesiana de Líderes Juveniles y los módulos de formación “BAKAS” involucran a los jóvenes desde la infancia hasta la edad adulta, formándolos para ser personas emprendedoras, misioneras y protagonistas de su camino de fe.

A través de retiros bien preparados, catequesis continua y programas pastorales para las familias, estas parroquias encarnan el auténtico sentido de la sinodalidad, demostrando en la actividad diaria que una fuerte colaboración entre salesianos y laicos genera comunidades vivas y reactivas, atentas a la oración y al escuchar a los jóvenes.

Las fronteras de los marginados

El corazón de la vida y misión de la Inspectoría FIN está con los pobres y abandonados: lo evidencia su labor con los niños de la calle, los jóvenes migrantes y las poblaciones vulnerables. El “Don Bosco Pugad” de Makati ofrece alojamiento y formación integral a 60 jóvenes migrantes provenientes de 22 provincias del país; mientras que la Fundación “Tuloy” de Alabang se ocupa de más de 170 niños de la calle, combinando educación académica con programas terapéuticos y técnicos.

Las casas-familia de Legazpi, Tondo y San José ofrecen refugio, acompañamiento y formación espiritual. La inspectoría, además, ha lanzado manuales y directrices para garantizar estándares y cuidados coherentes para el apostolado con migrantes.

Fraternidad y consagración

Más allá de las obras apostólicas, los salesianos de FIN se comprometen a vivir en fraternidad, orar en comunidad y verificar regularmente sus votos. Las visitas anuales y los retiros inspectoriales animan a los salesianos a vivir con autenticidad su consagración. Y, aunque siempre se puede mejorar, el perfil general es el de una fidelidad y una perseverancia llenas de esperanza.

Formación para el futuro

FIN alberga tres grandes casas de formación: el “Seminario de Don Bosco” y la comunidad específica de formación para los salesianos coadjutores del Asia Este-Oceanía, la “Comunidad Sandor”, ambas en Parañaque; y luego el Posnoviciado “Sagrado Corazón” en Canlubang. Junto con la “Escuela de Teología Don Bosco” (DBST) y el “Don Bosco College” (DBC), estas casas forman a salesianos provenientes de Filipinas y de toda Asia.

Con nuevos objetivos estratégicos centrados en la formación intercultural, la fidelidad vocacional, la profundidad espiritual y la salesianidad, la inspectoría sigue preparando salesianos capaces de responder con valentía a los desafíos del futuro.

Una misión que perdura

Mientras la Congregación Salesiana se dispone ahora a poner en práctica las directrices del Capítulo General 29°, la inspectoría responde a su tema – “Apasionados por Jesucristo, dedicados a los jóvenes” – con un renovado sentido de la misión. Y en cada diploma entregado, en cada pensamiento de la “buena noche salesiana”, en cada eucaristía celebrada y en cada vida salvada de la exclusión social, los Salesianos de Don Bosco de FIN proclaman cada vez al mundo: “Los jóvenes valen. El sueño está vivo. Y el fuego aún arde.”

En ANSChannel está disponible un video que ilustra la realidad salesiana de la Inspectoría FIN.

InfoANS

ANS - “Agencia iNfo Salesiana” - es un periódico plurisemanal telemático, órgano de comunicación de la Congregación Salesiana, inscrito en el Registro de la Prensa del Tribunal de Roma, Nº. 153/2007.

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