La solemne Divina Liturgia, en la Fiesta de la Presentación de la Bienaventurada Virgen María, fue presidida por Su Beatitud Sviatoslav Shevchuk, Arzobispo Mayor de Kyiv-Halyč y Presidente del Sínodo de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana, acompañado por el Nuncio Apostólico en Ucrania, monseñor Visvaldas Kulbokas, por moseñor Stepan Menyok, Esarca Arzobispal Emérito de Donetsk, y por numerosos otros prelados – obispos católicos de rito greco y de rito romano de toda Ucrania, junto también a algunos pastores de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana.
Monseñor Ryabukha, nombrado obispo auxiliar del Exarcado de Donetsk en septiembre de 2022, fue elevado a Esarca Arzobispal del mismo exarcado el pasado 17 de octubre de 2024, simultáneamente con la aceptación papal de la renuncia al gobierno episcopal presentada por el anterior Esarca titular, moseñor Menyok. El decreto de la nominación fue leído al inicio de la celebración por monseñor Andrii Khimyak, secretario del Sínodo de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana.
Posteriormente, durante la liturgia, monseñor Shevchuk destacó cómo el prelado salesiano ha aceptado este servicio en un momento en el que en el país se está llevando a cabo una sangrienta guerra de agresión. “Ante ti se presenta un largo y difícil período para sanar las heridas causadas por la guerra. Esté listo para servir a todos aquellos que han sufrido pérdidas a causa de esta brutal guerra, consolar a las viudas con la palabra de Dios, enjugar las lágrimas de los huérfanos, anunciar la esperanza en la misericordia de Dios”.
Luego, después de remarcar la feliz coincidencia de la toma de posesión en el día de la Fiesta de la Presentación de María, moserñor Shevchuk invitó al nuevo pastor a ayudar a los ucranianos que sufren y pierden la esperanza debido a la guerra a encontrar el camino hacia la Iglesia. Y exclamó: “Señor, ayuda a esos millones de ucranianos que hoy están perdidos y a quienes el enemigo quiere quitarles toda esperanza, a encontrar el camino hacia el verdadero templo. Tómalos de la mano y condúcelos a Ti”.
Seguidamente, monseñor Ryabukha prestó juramento y pronunció el “símbolo de la fe”, y luego se llevó a cabo el rito solemne de su toma de posesión como segundo Esarca de Donetsk.
Después de la liturgia, también el Nuncio Apostólico en Ucrania, monseñor Kulbokas, dirigió su mensaje al nuevo Esarca Arzobispal de Donetsk, recordándole “el poder de la oración” y “la importancia de dar siempre gracias”.
A continuación, monseñor Menyok también se dirigió a moseñor Ryabukha con palabras de orientación y felicitación, recordó las etapas de la formación del Exarcado de Donetsk y su desarrollo, así como la contribución del monaquismo local a la vida de los fieles de la zona.
Por último, habló el nuevo Esarca, quien agradeció a todos los presentes por su participación y afecto; a monseñor Menyok, por su “infinito apoyo” durante los dos años de colaboración en la administración del exarcado; a todos los fieles del exarcado, subrayando que “muchas más personas habrían querido estar allí, pero las restricciones del toque de queda y la guerra en general no permitieron que muchos vinieran”; y también a todos los militares, que aseguran la seguridad en esta difícil etapa histórica.
Finalmente, el salesiano pidió a la asamblea que rezara por él, explicando: “Donde dos o tres se reúnen en el nombre de Dios, Dios está siempre en medio de ellos. Y yo realmente quiero que Dios no nos falte en este tiempo y para siempre aquí, en nuestra tierra ucraniana, amada por Dios”.
Al finalizar el rito, todos juntos cantaron el himno espiritual de Ucrania “Dios, grande, uno”.