Así, durante el fin de semana del 2 y 3 de diciembre, esta numerosa asamblea de personas en varios niveles, cercanas a Don Bosco y su carisma, pudo constatar, si aún había alguna duda, la extraordinaria riqueza de propuestas para los jóvenes ofrecidas por la Red Don Bosco, animada por los Salesianos de la Inspectoría "San Francisco de Sales" de Francia y Bélgica Sur (FRB) y por la Familia Salesiana activa en los mismos territorios.

En el transcurso del encuentro, se enumeraron, examinaron y evaluaron muchas de estas actividades: la gran reunión salesiana a finales de agosto de "Campobosco", que reúne a cientos de jóvenes de trece a veinticinco años desde hace muchos años; el Servicio Internacional de Voluntariado Salesiano de la ONG "VIDES" (Voluntariado Internacional Mujer, Educación y Desarrollo), que envía jóvenes a Francia, Bélgica o al extranjero cada año para servir a los jóvenes (dos de sus voluntarios están actualmente en Madagascar); el esfuerzo dedicado para ofrecer cada año sesiones de "Brevet d'Aptitude aux Fonctions d'Animateur" (BAFA), inspiradas en los métodos de enseñanza salesiana en las obras de la Familia Salesiana en Lyon, Lille, Chambéry, Feurs, Saint-Geniez-d'Olt y muchos otros lugares.

También se presentaron las realidades de las capellanías de la parroquia "Saint-Jean-Bosco" en París; del servicio "Ephata Don Bosco" en Farnières; de la pastoral "Fort Rêveurs" en la parroquia de Lieja; o el nuevo programa "Top Jeunes" en Lyon.

Si este fin de semana de principios de diciembre siempre ha sido una ocasión para reunir a religiosos y religiosas comprometidos en actividades pastorales, este año el equipo de "Don Bosco Jeunes" - el Padre Xavier Ernst, Salesiano de Don Bosco, la Hermana Valentine Delafon, Hija de María Auxiliadora, y Stéphanie Datti, Salesiana Cooperadora - decidieron elevar aún más el objetivo, para hacer del encuentro una oportunidad para compartir el sueño de Don Bosco y así "multiplicar las obras, el número de participantes, las acciones... Multiplicar el fuego que nos impulsa", como explicó bien el Padre Xavier Ernst en la inauguración.

Con el compromiso, siempre constante, hacia los jóvenes: para ofrecerles espacios donde puedan sentirse seguros y bien, creciendo y desarrollando armoniosamente sus potencialidades.

A nivel operativo, durante el fin de semana se crearon diez grupos de trabajo, llamados "compañías" (en referencia a las compañías que surgían entre los jóvenes del oratorio de Don Bosco, como la "de la Inmaculada", fundada por Santo Domingo Savio). Específicamente, se trabajó en estos ámbitos: el espacio de los veinticinco-treinta y cinco años (con Florian Lucchini), la acogida de los más pobres y de los migrantes (con la Hermana Marie Vaillant), la parentalidad (con Marie Croon), la llamada y el compromiso (con las Hermanas Clémence Ruchaud y Diane Hervieux), la formación (con Maxime Croon), la escucha y el apoyo a los jóvenes (con Laura Thieblemont), el compartir los recursos (con Gauthier Fanucci), la comunicación (con la Hermana Anne-Flore Magnan), la ecología (con Théa Viret) y, finalmente, la fe y la espiritualidad para los jóvenes (con la Hermana Marthe Rios).

Así es como el sueño de Don Bosco promete seguir viviendo y creciendo también en 2024.

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