Los muebles se entregaron en 2022, al Centro Juvenil de Manzini, dirigido por los Salesianos, y posteriormente se distribuyeron al "Centro de Estudios Bosco", al "Centro Agrícola Juvenil Bosco" y a la "Residencia Enjabulweni". El Centro Juvenil de Manzini se fundó en los años setenta y sigue prestando servicios de atención a jóvenes marginados. Entre sus servicios se incluyen la escuela primaria gratuita para niños que abandonaron los estudios debido a la pobreza, dos centros de formación profesional para jóvenes mayores, atención residencial para antiguos niños de la calle y una escuela para niños de la calle primerizos.
En "Bosco Study Centre", un centro de ayuda al estudio, los salesianos sustituyeron los viejos muebles de la biblioteca y la sala de profesores, lo que permitió a alumnos y profesores realizar su trabajo cómodamente. También se entregaron muebles más resistentes a "Enjabulweni Residential Care Home", que podrá modernizar sus salas de estudio y su comedor.
Las oficinas del propio Centro Juvenil de Manzini también se beneficiaron de la donación y fue posible sustituir sillas y escritorios de oficina viejos, modernizar las instalaciones de enseñanza y mejorar las condiciones de trabajo, aprendizaje y estudio. Uno de los beneficiarios, Lucky, que asiste al instituto salesiano y vive actualmente en la residencia, expresó su gratitud por la donación del mobiliario y dijo que les ha ayudado a él y a su hermano, sobre todo cuando estudian.
"Cada uno tiene su silla y su escritorio, así que podemos estudiar tranquilos", explicó Lucky, "ya no hay desorden y ahora todo está perfecto", añadió, expresando también su agradecimiento por las nuevas camas que han llegado a la residencia. "Cuidaremos bien los nuevos muebles, los trataremos con cuidado, porque también son de gran utilidad para los que vengan después de nosotros", concluyó.
La población de eSwatini se enfrenta a inmensos retos, como la pobreza, la inseguridad alimentaria crónica, numerosos casos de VIH/SIDA y un clima a menudo impredecible. Según el Banco Mundial, cerca del 63% de la población vive por debajo del umbral de pobreza y cerca del 29% por debajo del de extrema pobreza. La incidencia del VIH/SIDA, que afecta al 31% de la población, es de las más altas del mundo y la esperanza de vida es de solo unos cuarenta y nueve años.
Los misioneros salesianos trabajan para satisfacer las necesidades básicas y proporcionar educación a los jóvenes necesitados. De este modo, los jóvenes pueden encontrar y mantener un empleo y, a su vez, contribuir a sus familias y comunidades.