Para la ocasión, el padre José Pastor Ramírez Fernández, Inspector de las Antillas, presentó la visión humanista, educativa y pastoral del obispo salesiano. En la misma, recordó las palabras del actual obispo de Barahona, monseñor Andrés Napoleón Romero Cárdenas, en el funeral de monseñor Rivas, el 14 de agosto de 2018, en la Catedral Nuestra Señora del Rosario: “Asumió con coraje y optimismo la desafiante tarea de comenzar, con pocos sacerdotes, pocas parroquias, pocos agentes de pastoral... Pero gracias a su carisma, visión y entrega emprendió este peregrinar diocesano en nombre de Dios. Su paso por la diócesis deja una gran cosecha de nuevos cristianos, nuevas comunidades, nuevas parroquias y fuertes instituciones sociales que han contribuido grandemente al desarrollo de la región”.
El humanismo salesiano de monseñor Rivas sigue hoy dando sus frutos, ya que fue él quien puso las bases y fundamentos de la Acción Pastoral, de la diócesis de Barahona, con la creación de parroquias y capillas. Promotor y mentor de la Pastoral Vocacional, que dio como fruto, los primeros sacerdotes diocesanos; padre del desarrollo espiritual, social, cultural y económico de la región. También durante sus primeros años de salesiano sacerdote se desempeñó como promotor vocacional de los salesianos en el país. Se desempeñó como formador de los candidatos al sacerdocio, específicamente como Maestro de Novicios.
Además, siendo el creador de la Fundación de Apoyo al Suroeste (FUNDASUR), del ICATEBA, hoy Universidad Católica Tecnológica de Barahona (UCATEBA), asociaciones de campesinos como Lemba, ideólogo del Centro de Formación de
Cabral, hacedor, junto a los salesianos, de las Escuelas parroquiales, Centros juveniles, Farmacias y dispensarios médicos. En mulas, en jeep y a pie, por lomas y en llanos, recorrió todo el territorio de la diócesis y más allá. También demostró en todos los escenarios, ejerciendo su servicio como pastor, que era un misionero salesiano que no le detenía nada ni nadie, siendo gran defensor del Medioambiente, fuera y dentro de la diócesis. Así como también su gran sensibilidad y preocupación por los migrantes y su realidad, promoviendo la Pastoral Haitiana y defendiendo la dignidad de los inmigrantes.
Por esto y muchas cosas más, hoy podemos afirmar que monseñor Rivas es el diseñador y el gran maestro de la Iglesia local de Barahona.