En Gumbo, la Familia Salesiana realiza desde hace años un inmenso trabajo para miles de personas: los Hijos de Don Bosco animan una parroquia, una escuela primaria con 1.800 alumnos, una secundaria con 450 alumnos, una escuela técnica, un oratorio y un campo de refugiados con unas 9.500 personas. A ellos se unen también las Hijas de María Auxiliadora, que dirigen otra escuela primaria y las Hermanas de la Caridad de Jesús, que están a cargo de un dispensario de salud.
En apoyo a este gran proyecto educativo y solidario salesiano, desde el año pasado también se sumó la Fundación Misionera Salesiana "Don Bosco" de Varsovia, que habiendo ganado la licitación para proyectos humanitarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Polonia, pudo construir en Gumbo, gracias al apoyo de la agencia polaca para el desarrollo internacional, “Polish Aid”, y en colaboración con la Oficina de Planificación y Desarrollo local (PDO, en inglés), un nuevo edificio escolar que ha mejorado las instalaciones de la escuela primaria.
“¡En la escuela primaria se habían llegado a tener lecciones con 140 alumnos por clase! -dice el padre Piotr Gozdalski, presidente de la Fundación- volviendo urgente la construcción de nuevos ambientes. Las nuevas 4 aulas están ayudando a dividir los grupos y a tener menos alumnos por clase, en beneficio de la seguridad de todos y de la calidad de la educación que se ofrece”.
También el año pasado, el proyecto salesiano financió comida para unos 700 alumnos de primaria y dio alimentos a 700 las familias necesitadas del campo de refugiados; y para completar la obra, también entregó medicamentos y productos para la higiene y el cuidado personal, acompañando estas entregas con sesiones especiales para fomentar la adopción de actitudes y hábitos higiénicos.
Este año, nuevamente como parte del mismo proyecto apoyado por "Polish Aid", la Fundación Misionera Salesiana planea continuar ayudando con alimentos a 700 estudiantes de primaria y 700 familias del campo de refugiados.
Además, cubrirá parte de los gastos de la clínica móvil destinada a las personas que viven en las aldeas aledañas al campamento, para que tengan acceso a la atención médica necesaria. Y otros dos proyectos previstos son: la instalación de lámparas de energía solar que darán mayor seguridad al campo de refugiados y la construcción de un campo deportivo destinado a fomentar la actividad física y la sana diversión entre los niños del campo.
“Los maestros de la escuela, los niños y la gente están muy contentos de poder contar con nuestro apoyo. Y nosotros, como Don Bosco, estamos felices de dárselo”, concluye el padre Gozdalski.
En YouTube se pueden ver algunos videos (1 - 2) sobre el apoyo que la Fundación da a los más necesitados de Gumbo.