La colaboración entre ambas entidades ha beneficiado a más de 20.000 menores vulnerables, niñas, niños y jóvenes en África, América y Europa durante estos diez últimos años. La alianza comenzó en 2010 en Senegal, con la Escuela de Tambacounda, poco después en América con la primera escuela sociodeportiva dentro de una favela, la de Jacarezinho en Río de Janeiro (Brasil) y, ya en 2012 en Europa, con las escuelas sociodeportivas en Manique y Funchal (Portugal). Hoy este trabajo conjunto suma 21 proyectos en 14 países, para atender a casi 4.000 menores en esta temporada, utilizando el deporte educativo y sus valores como palanca catalizadora de mejoras sociales en las comunidades.
El director de Misiones Salesianas destacó que “el éxito de estos 10 años de colaboración se debe a dos factores fundamentales: compartir valores como el esfuerzo y el trabajo en equipo; y una preocupación por ayudar a través de la educación y el deporte a niños, niñas y jóvenes en situaciones muy vulnerables”.
Por su parte, Emilio Butragueño quiso destacar su agradecimiento a Misiones Salesianas ya que “si bien han sido muchos los mecenas y apoyos con los que hemos contado en nuestra andadura juntos en estos 10 años, es fundamental contar con la sólida base de educación y atención a los más vulnerables como lo hace Misiones Salesianas. Vosotros sois nuestros ojos y nuestras manos en el terreno y desde siempre habéis dado una gran importancia al deporte en la formación”. Butragueño recordó las visitas realizadas por él mismo a algunos de estos proyectos, así como los partidos benéficos destinados a su sostenibilidad.
Tanto la Fundación Real Madrid como los Salesianos son conscientes de que la práctica deportiva constituye un importante factor de integración social y de promoción de valores. En las escuelas salesianas se enseñan y practican la solidaridad, la participación, el espíritu de equipo, el respeto al antagonista y la inclusión. Por estos motivos Salesianos y Real Madrid decidieron hace 10 años unir las fuerzas en un proyecto conjunto en favor de la infancia y de la juventud más desfavorecida.
El proyecto de Escuelas Sociodeportivas se desarrolla en centros educativos salesianos y es mucho más que fútbol y baloncesto. Significa, sobre todo, educación en valores, refuerzo escolar, apoyo nutricional y atención sanitaria y psicológica. Pero también incluye actividades de ocio y tiempo libre para los menores más vulnerables. “Ellos juegan, nosotros educamos”, en palabras de Emilio Butragueño.
Para celebrar el aniversario, ambas organizaciones han lanzado el concurso creativo “Cambia las Reglas” con el que, según explicó Eusebio Muñoz “queremos que la comunidad educativa salesiana se acerque a los proyectos sociodeportivos y los apoye, pero, sobre todo, queremos que vean que se puede cambiar el mundo modificando las reglas, cambiando el egoísmo por solidaridad, el individualismo por el trabajo en equipo y la cooperación, el ensimismamiento por el respeto”. 60.000 alumnos de centros salesianos en España podrán participar en el reto en tres categorías diferentes por edad y por tipología de proyecto durante 10 semanas.
