En las costas nicaragüenses el Eta ha llegado el martes a tierra firme, para desplazarse violentamente hacia el Norte, llevando fuertes lluvias y vientos, provocando deslaves, desmoronamientos y desbordes.
Los Gobiernos centroamericanos definieron el ciclón Eta como una de las peores calamidades de las últimas décadas, que además llegó en un momento crítico de pandemia. El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei pidió ayuda internacional solicitando operaciones de socorro. Siempre según el presidente, empeñado en estos días en el reconocimiento de las áreas golpeadas por el ciclón, sólo en el Departamento de Alta Verapaz, la devastación ha obligado a abandonar las propias casas a unas 200 mil personas y ha devastado una superficie de 7.300 hectáreas - destruyendo la cosecha y agravando aún más las condiciones de una de las áreas más pobres del Continente.
Desde la misión salesiana de San Pedro Carchá, el salesiano italiano, el padre Leo, ha compartido un breve video en el cual declara: “Aquí en estos días la lluvia fue fuerte, ha inundado los pueblos, las calles están cerradas, las casas están inundadas y tantas personas no se pueden mover... Se puede decir que estamos en medio de una laguna”.
“Nos dirigimos a ustedes para que puedan acompañarnos con la oración, para que la gente no se desespere y todo esto pase rápido”, añadió.
La iglesia de Campur ahora está enteramente inundada y los salesianos tuvieron que suspender las salidas a los poblados porque las rutas están cortadas por los árboles caídos y desmoronamiento. “Que Dios nos ayude y acompañe y María Auxiliadora nos proteja a todos”, concluye el padre Leo.