Cuando hablamos del voluntariado – manifiesta Mons. Esteban María Laxague, salesiano, Obispo de Viedna, en Argentina - hacemos referencia a tantos que se descubren para los demás y ponen su vida, sus capacidades y sus saberes al servicio de los demás. Compartir la propia vida con otros, y caminar con ellos es la que define esta realidad que viven muchos (...) Contemplando ‘los voluntarios’ se renueva la esperanza en el otro, en que el ser humano es un don para el otro”.
Salud, educación, fe, trabajo, juego ... hay muchas áreas en las que se puede hacer un voluntario. Y todo esto ha sido fielmente capturado por el lente de la fotógrafa Martínez que se presentó en su libro de fotos.
Comentando sobre el tema la autora: “Cumplir el sueño de misionar en Angola fue lo más lindo que pude haber experimentado en mi vida (...) me enseñó a valorar la vida, a vivir el presente. A no adelantarnos en pensar en mañana sino vivir hoy, ahora. En dar mi tiempo no cosas materiales. A que la felicidad es completa si la compartimos. (...) Misionar es una forma, es un estilo de vida que te marca el alma y es para siempre. Decía la madre Teresa de Calcuta ‘No podemos hacer grandes cosas, pero si cosas pequeñas con un gran Amor”.
Evangelina Martínez es una fotógrafa de 38 años de edad, de Carmen de Patagones, Argentina, que entre los años 2015 y 2016 y durante seis meses realizó el voluntariado en Angola. Con la ayuda de la ONG "Misión Puente", coordinado por el sacerdote argentino salesiano P. Marcelo Ciavatti; prestó servicios humanitarios en las casas salesianas de Luanda, capital de Angola, e inmortalizó la realidad que encontró.
Su misión como voluntaria fue declarada de interés social, educativo y cultural, mediante un acto oficial, en la provincia de Argentina de Río Negro.