Desde la semana anterior a la Navidad, 49 inmigrantes han estado atrapados en dos botes salvavidas, de propiedad de organizaciones no gubernamentales (ONG) que operan en el Mediterráneo central. Los barcos no pueden atracar en ningún puerto debido a la diferente interpretación que los gobiernos de la UE dan al Derecho del Mar en materia de ayuda a los migrantes en dificultad y por las diferencias y desconfianzas políticas dentro de la Unión Europea. .
El viernes pasado, 4 de enero, dos barcos partieron de Malta para llevar suministros a los dos barcos que transportaban migrantes y para transportar a varios parlamentarios alemanes, parlamentarios europeos, un representante eclesiástico y una nueva tripulación.
Imposibilitados de ayudar directamente a los migrantes, los salesianos de Malta ofrecían hospedar a los 16 miembros de la tripulación, en su mayoría formados por marinos alemanes que estaban agotados por la larga espera, después de haber pasado casi cuatro semanas en una misión de rescate en el mar.
“Nuestras oraciones acompañan a quienes aún están a bordo, mientras pedimos una acción humanitaria en favor de quienes arriesgan sus vidas y de sus familias, huyendo de sus países de origen y de Libia”, concluyeron los salesianos de Malta.