El Centro Salesiano de Darkhan, que anima la parroquia dedicada a María Auxiliadora en la ciudad de Mongolia, el pasado domingo fue un día especial porque vivieron en comunión con los más necesitados. Las actividades comenzaron con la Eucaristía presidida por el Párroco, el P. Joseph Nguyen Manh Dat, y concelebrada por el P. Simon Lee, P. Jaroslav Vracovsky y el P. Anthony Werun, y con la presencia de unos 120 fieles especiales.
En la homilía, el celebrante animó a todos a orar por todos los pobres del mundo, y el saber escuchar la voz de los pobres y compartir su amor con ellos, ya sea con gestos y con palabras. El párroco les mostré un breve video sobre la situación de tantas personas pobres, que viven en la soledad y que están abandonadas en todo el mundo. Recordó que cada día, a nivel mundial, unas 25.000 personas mueren a causa de la pobreza y el hambre, y realizó un llamado para ayudar a los pobres, a compartir su tiempo y los recursos y para mostrar amabilidad y cuidado humano.
Para traducir en gestos concretos, la comunidad salesiana dio el ejemplo invitando a 70 personas pobres, marginadas y excluidas de la sociedad a almorzar en la comunidad. Antes de iniciarse el almuerzo, fueron invitados a la iglesia donde pudieron visualizar el video donde el Papa anuncia la iniciativa de la “Jornada Mundial de los pobres”.
“La Iglesia pertenece ante todo a los pobres y los pobres son siempre bienvenidos en la Iglesia”, declaró el párroco salesiano.
Después del almuerzo donde los salesianos ofrecieron los alimentos, los pobres compartieron un momento festivo y de convivencia. Al finalizar la fiesta, los invitados especiales recibieron un regalo: un poco de carbón, tan útil para estos momentos donde el invierno en Mongolia es severo y muy fuerte.
Fuente: AustraLasia