Tanto en Puerto Rico, como en República Dominicana los salesianos tienen obras educativas, parroquias, oratorios, centros juveniles y se preparan para organizar la ayuda a las personas que han quedado sin techo, sin agua, sin alimentos.
El P. Adán Marrero ha manifestado en un comunicado por Whatsapp que “gracias a Dios los salesianos se encuentran sin problemas y resguardados”. “Estamos incomunicados” ha continuado su breve mensaje, esperando que el huracán María pueda disminuir.
El P. Marrero ha enviado algunas fotos tanto de la casa Parroquial y de la Parroquia San Francisco de Cataño. “Puerto Rico ha quedado devastado con el paso del huracán. El 100 por ciento de la isla está sin energía eléctrica. Muchas personas han perdido sus casas. Los salesianos han sufrido daños en la infraestructura, en las instalaciones deportivas, en las escuelas y en las residencias comunitarias, pero gracias a Dios los salesianos y nuestros destinatarios los jovenes se encuentran a salvo”. Y concluye que informar es un poco difícil porque “cayeron muchas torres y nos encontramos sin electricidad”.